La felicidad que puede provocar, en cualquier persona, instalar en verano una pileta de natación en el fondo de la casa, se transformó en dolor y casi en tragedia en el barrio de Mataderos. El propietario contrató una grúa porque la piscina prefabricada de fibra de vidrio, para llegar al fondo del predio, tenía que pasar por encima de la casa, un chalet de tejas. El problema fue que la pesada grúa, y el camión que soportaba su peso, se fueron de lado y el brazo de la máquina cayó sobre la casa, que quedó virtualmente partida en dos. Los cuatro operarios que realizaban la tarea resultaron heridos y tuvieron que ser asistidos en el Hospital Santojanni. La caída de la máquina produjo daños en casas linderas.  

“La grúa fue ubicada en la calzada paralela a la línea de edificación municipal, pero perdió el centro de gravedad, se volteó 45 grados hacia un costado, apoyando todo el brazo sobre el techo del chalet”, describió uña fuente de la Policía de la Ciudad. Los operarios fueron retirados primero por los bomberos y luego por ambulancias del SAME. El problema no terminó allí, porque a la casa, ubicada en Saladillo al 2600, tuvo que llegar otra grúa para poner de pie y retirar a su hermana de hierro.