El índice de inflación elaborado por el Instituto Estadístico de los Trabajadores (IET) que funciona en la Universidad Metropolitana para la Educación y el Trabajo (UMET) arrojó una suba del 1,5 por ciento en enero con respecto a diciembre, y acumuló un alza del 25,7 por ciento en la comparación interanual. Para el decil de menores ingresos, la inflación anualizada ya se ubica en el 29,4 por ciento.
El mes pasado, el alza de precios estuvo traccionada por el rubro de esparcimiento, con el 2,7 por ciento, por la temporada veraniega y el traslado a precios de la suba del dólar a la electrónica de consumo. En tanto, equipamiento y mantenimiento del hogar avanzó el 2 por ciento por el encarecimiento de los electrodomésticos.
Alimentos y bebidas registró una suba del 1,8 por ciento, al tiempo que transporte y comunicaciones lo hizo en un 1,5 por ciento a partir del alza de la nafta y de los equipos celulares. En la comparación anual, la inflación para el 10 por ciento de menores ingresos es del 29,4 por ciento, mientras que el decil de mayores ingresos afronta un alza de precios del 23,6 por ciento. El IET anticipó que “para febrero es altamente probable que la inflación vuelva a ubicarse por encima del 2 por ciento”, de la mano de la suba de tarifas de transporte en el Área Metropolitana de Buenos Aires, entre otros aumentos.
Varios consultores alineados con una visión más ortodoxa y cercana a las posturas del gobierno, como Daniel Artana, titular de FIEL, anticipan que la inflación no podría ser menor a dos por ciento en febrero y que las metas de inflación del Banco Central, que a fines de diciembre fueron corregidas, volverán a quedar incumplidas porque la inflación será mayor.
