Un nuevo tribunal de la Cámara Penal revisará el fallo que condenó a 9 años de prisión al mecánico que manejaba su Audi TT a una velocidad "inusitada" cuando terminó con la vida del cadete Damián Orgaz, en marzo de 2016. Es que la defensa de Carlos Schmitt presentó un recurso horizontal de apelación ante el cambio de calificación de homicidio culposo con dolo eventual, por el que fue condenado a 5 años en primera instancia; al de homicidio simple, por el que le dieron 9 años de prisión, en diciembre pasado. La Cámara aceptó la presentación y ahora la Oficina de Gestión Judicial deberá conformar un nuevo tribunal y fijar fecha para la revisión, en una nueva audiencia.

Lo que fue un logro para la familia de la víctima y para la Fiscalía, en diciembre pasado, cuando se dio el incremento de la pena y los jueces admitieron la calificación penal propuesta por la parte acusadora, fue puesto en crisis y deberá atravesar una nueva instancia judicial.

El dolor de la madre y la hermana de Damián se convirtieron en lágrimas de alivio por aquellos días, cuando celebraron el fallo "ejemplar", que sentó un precedente a nivel nacional en materia de siniestros viales.

La evaluación de los jueces de Cámara fue clara cuando aumentaron la pena y cambiaron la calificación penal. "Lo que hacía era como practicar tiro fuera de un polígono y en una zona poblada; o una suerte de ruleta rusa, donde el revólver no se cargaba con una sola bala", lanzaron en el fallo.

El tribunal compuesto por los jueces Daniel Acosta, Carolina Hernández y José Luis Mascali fue unánime al modificar la figura penal de homicidio culposo con dolo eventual y acusó al imputado por homicidio simple. Justamente, ése es el punto que apeló la defensa. "El pronunciamiento resulta totalmente agraviante, no solo porque se valora incorrectamente la prueba producida en el debate hasta el extremo de tergiversarla; sino que aplica incorrectamente una calificación legal inexistente en el derecho penal argentino, por ende inconstitucional", lanzó el abogado Ignacio Carbone, en su presentación.

En el fallo de diciembre, los camaristas sostuvieron que "el Poder Judicial no puede convalidar una injusticia extrema y así sumir al abandono a la familia Orgaz". Y analizaron que "Schmitt circulaba por la diagonal Río Negro, de contra mano, y para ello había abandonado su carril. Lo hacía a una velocidad no sólo excesiva sino inusitada, aprestándose al arribo a dos calles cuyo tránsito concluían en la diagonal y los vehículos provenientes de dichas arterias se incorporaban justamente a la mano por donde él se conducía pero en sentido contrario. Estaba oscuro. El mismo puso todo los condimentos ‑tal cual hacía durante muchísimos años al utilizar la diagonal como pista de prueba‑ para que una tragedia se concretara y finalmente así ocurrió, al no ser acompañado por el azar que había estado de su lado durante tanto tiempo", reza el fallo.

El hecho. La noche del hecho, en marzo de 2016, barrio Belgrano se conmovió por la brutalidad del suceso provocado por un hombre al que estaban acostumbrados a ver por la zona desde hacía dos décadas: siempre en un vehículo diferente y a alta velocidad, probando autos. Pero la suerte se le terminó: Orgaz falleció cuando circulaba en su moto por la diagonal Río Negro y Campbell, para entregar un pedido y fue impactado por el Audi TT de Schmitt, que cruzó de carril para esquivar una irregularidad de la calle, a una velocidad "inusitada", probando su auto nuevo. El cuerpo del chico fue desmembrado por la fuerza del impacto, al punto que un pie fue encontrado en el techo de una casa de dos plantas.

El chico era cadete en una rotisería donde su mamá cocinaba. El la dejo en el local y salió a repartir los primeros pedidos. Al rato, la mujer fue avisada de que Damián había tenido un accidente y antes de salir agarró gasas y agua oxigenada. "No era para agua oxigenada lo que tenía mi hijo", sollozó la madre durante el juicio oral, en un relato conmovedor.