El 87 por ciento de los inquilinos en el país tiene como máxima inquietud el precio del alquiler de su vivienda. Todos ellos destinan el 41 por ciento de sus salarios en esos pagos mensuales, sin considerar las expensas ni el pago de servicios como luz, agua y gas y los impuestos inmobiliarios. El 87 por ciento no cree que pueda alguna vez llegar a ser propietario. Estos datos se desprenden del informe que acaba de presentar la Federación de Inquilinos Nacional sobre las condiciones de vida y vivienda de encuestados de todo el país. Según el informe el 17 por ciento de los hogares de la Argentina accede a la vivienda a través del alquiler.

“La elaboración de este informe es un hecho inédito para el sector ya que no hay mediciones oficiales acerca de la problemática del alquiler de vivienda”, declaró Gervasio Muñoz, presidente de la Federación de Inquilinos Nacional, quien también afirmó que “una vez que las familias ingresan en la rueda del alquiler, con aumentos de precio que superan ampliamente los índices de inflación y de variación salarial, les resulta muy difícil salir. Esto demuestra la importancia de avanzar con el tratamiento de la Ley Nacional de Alquileres”, que tiene media sanción en el Senado y espera su tratamiento en Diputados. El proyecto de Ley de Alquileres introduce la figura de “alquiler social”, limita a un mes de alquiler lo que pueden cobrar las inmobiliarias como depósito de garantía y que no se podrá cobrar más de medio mes de alquiler para la renovación del contrato, entre otras medidas que apuntan a equilibrar la relación entre dueños e inquilinos.

Otro dato que se desprende de la encuesta federal realizada por la Federación de Inquilinos nacional –integrada por organizaciones de Capital Federal, Río Negro, Neuquén, San Juan, Córdoba, Santa Fe, Corrientes, La Pampa y Tierra del Fuego- es que el 64 por ciento de la población que alquila averiguó alguna vez por un crédito hipotecario, sin embargo, un 87 por ciento cree que nunca va a lograr ser propietario.

Otra dato importante es que el 97 por ciento de los encuestados considera que no existe un control efectivo sobre las inmobiliarias, lo cual tiene como consecuencia incumplimientos por parte de los propietarios y la evasión impositiva del mercado inmobiliario. 

El 49 por ciento de los entrevistados aseguran que a la hora del pago de las expensas no se les discriminan las ordinarias de las extraordinarias, y que de este modo terminan pagando altas cifras que no solo valorizan el inmueble ajeno, sino que elevan de forma encubierta la rentabilidad del sector propietario. 

Por otro lado, la encuesta fue respondida por un 60 por ciento de mujeres, de las cuales el 25 por ciento relató que alguna vez le negaron la posibilidad de alquilar una vivienda por tener hijos. 

A lo largo de este año se prevé un panorama poco alentador con respecto a este tema. Mientras el gobierno pretende fijar un techo de 15 por ciento para en las negociaciones salariales, la gran mayoría de los contratos de alquiler que se firmaron en la Ciudad de Buenos Aires en lo que va del año vienen con un aumento semestral del 15 por ciento, es decir, un 30 por ciento anual.

En Argentina el valor de los alquileres y su aumento no está estipulado por ley, sino que lo autoregula el mercado inmobiliario. Según la asociación porteña Inquilinos Agrupados, actualmente, “un alquiler representa alrededor del 50 por ciento de un ingreso promedio; contando impuestos, expensas y servicios llega al 70 por ciento y la tendencia es que siga subiendo. En este contexto, el oficialismo tiene frenado un proyecto de ley en la Cámara de Diputados que resolvería esta situación.”