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Juan Román Riquelme, de regreso en Barcelona tras las vacaciones de diez días por las Fiestas, negó que haya tenido o tenga problemas con el técnico Louis van Gaal y descalificó las acusaciones sobre un posible fingimiento de lesión para no jugar en el último partido, ante el Mallorca, cuando la continuidad de Van Gaal dependía del resultado: “Todo esto son comentarios de alguno al que no le caigo bien y que trata de hablar mal de mí”, dijo, e insistió en que “nunca” tuvo problemas con Louis van Gaal. Justificó su decisión de no jugar: “Hice lo que tenía que hacer, porque tenía una molestia”, aseguró. Además, subrayó que, desde su llegada al Barcelona, está “tranquilo”, convencido de haber hecho “las cosas bien”. Respecto de Bianchi, fue preciso: “Soy hincha de Boca y ojalá que Bianchi le pueda dar muchos títulos”. Después evitó polemizar sobre los rumores de transferencia y destacó su agradecimiento a la afición azulgrana, y su deseo de pagar con títulos: “Hemos descansado diez días. Eso es bueno; pero será mejor si el domingo le ganamos al Recreativo”.