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Con una buena tarea colectiva y con algunas individualidades en alto nivel, el Boca mixto que plantó Carlos Bianchi se dio el gusto de ganarle 1-0 a Independiente con un gol de Matías Donnet en el segundo tiempo y quedó a un paso de adjudicarse el pentagonal del verano. Con este resultado, Boca lidera el torneo con 7 puntos, San Lorenzo lo sigue con 5, River tiene 4, Independiente quedó con 3, y cierra las posiciones Racing sin unidades, aunque tiene un partido menos que sus rivales.
El primer tiempo fue entretenido, con mucho ritmo y situaciones de peligro en los dos arcos. En ese contexto, Boca se mostró más compacto, con más dinámica y mejor administración de pelota en la zona de creación. La clave estuvo en la clara intención de presionar en el medio y aprovechar la movilidad de sus jugadores para quitarle la pelota a Independiente. Con Estévez arrancando desde atrás como improvisado conductor y con un correcto trabajo de los volantes, el equipo de Bianchi logró su objetivo en la mitad de la cancha, aunque le faltó peso arriba para agregarle profundidad a su dominio. Si bien Bonvín mostró algunas cualidades interesantes y complicó a sus marcadores, el ataque de Boca adoleció de potencia para colocarse en ventaja.
Del otro lado, Independiente aparecía sorprendido, sin poder darle protagonismo a Montenegro y sin conseguir incorporar a Silvera a su circuito ofensivo. Por eso, el goleador del campeonato quedó demasiado aislado, bien tomado por los centrales rivales. Sin participación de sus fuentes generadoras de juego naturales, el que tomó la posta fue Ríos, que aprovechó la subidas de Serrizuela para complicar al debutante Zanotti por el sector derecho. Desde allí nacieron las mejores chances del último campeón, más allá de que llegó en menor proporción que su rival.
Con el correr de los minutos, los pibes de Boca acentuaron su dominio. Al mejor trato de pelota de los primeros instantes le agregaron llegadas, por lo que justificaron una ventaja que no llegó, pese a dos muy buenas maniobras de Bonvín. En la primera recibió un pase de Pérez y su zurdazo se estrelló en el travesaño, mientras que en la otra le ganó bien la posición a Salina, pero su remate fue rechazado por Leo Díaz. Independiente recién inquietó sobre el final del primer tiempo, cuando Ríos tuvo un situación inmejorable. Sin embargo, el volante elevó demasiado su remate desde el área chica tras un buen desborde de Eluchans.
Con más presencia física, el conjunto de Gallego trabó el desarrollo y el partido ya no se jugó al ritmo que pretendía Boca. El trámite se deslució, aparecieron las imprecisiones y las situaciones de riesgo comenzaron a escasear. Ante la nueva perspectiva, el que parecía más sólido para la recta final era Independiente. Incluso pudo ponerse en ventaja a través de un cabezazo de Eluchans, que no supo capitalizar un centro de Javier Díaz. Sin embargo, cuando ya no acumulaba méritos y más lejano parecía, Boca se encontró con el gol. Franco cometió el único error de la noche y pifió en el área chica. Donnet recibió el regalo y con un toque suave de zurda señaló el tanto de la victoria, más allá de que Independiente tuvo algunas ocasiones para igualar. Fue justo por lo que Boca había hecho en la primera parte.