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En tanto el Gobierno oficializaba la incorporación progresiva a los salarios básicos del sector privado de los 200 pesos que hoy se pagan como no remunerativos, los trabajadores estatales reclamaban un aumento de emergencia de la misma cifra, tanto para empleados de nivel nacional como provincial y municipal.
A través de un conjunto de decretos, el Gobierno oficializó en el Boletín Oficial el traspaso –a razón de 28 pesos mensuales hasta febrero de 2004– de la suma no remunerativa a los salarios, además del aumento del mínimo, vital y móvil a 300 pesos en forma escalonada hasta fin de año, de la jubilación mínima a 220 pesos y la suspensión de los reintegros de aportes a la seguridad social hasta julio y octubre del año próximo (del 7 por ciento actual al 9 y al 11 por ciento del salario).
La conducción nacional de ATE, encabezada por Pablo Micheli y acompañada por una decena de delegados de distintas provincias, se entrevistó en la Casa Rosada con el ministro del Interior, Aníbal Fernández, para presentarle el reclamo. Además, los estatales anunciaron para la primera quincena de agosto un plan de lucha con movilización en todo el país para exigir respuesta a sus reclamos.
“Esto no es contra el Presidente (Néstor Kirchner), sino para fortalecer la democracia a través del cumplimiento de una exigencia de los trabajadores y los sectores más postergados”, aclaró Micheli al término de la reunión con el titular de la cartera política.