EL MUNDO

Damasco, último blanco terrorista

La capital de Siria, un país que se mantenía estable desde hace casi dos décadas, fue atacada ayer con una serie de explosiones.

Al menos seis explosiones estremecieron a un barrio diplomático en Damasco y a causa del hermetismo de las autoridades sirias la información fue confusa y con cuentagotas. Según el Ministerio de Interior sirio, la explosión se debió a “una carga que pusieron cuatro personas debajo de un auto y causó daños al edificio en Mazzeh”. Pero de acuerdo a diversas fuentes, un comando de entre cuatro y siete hombres armados y encapuchados atacó en la noche local un edificio de las Naciones Unidas. El ataque se habría llevado a cabo con lanzacohetes en el barrio de Mazzeh, a la entrada oeste de la capital siria, donde hay varias embajadas, en particular las de Gran Bretaña, Canadá, Irán y Arabia Saudita. Le habría seguido una batalla de una hora entre la policía y los atacantes, dos de éstos fueron muertos, así como un policía y una mujer, informó el Ministerio de Interior sirio. Al menos tres lograron huir en un coche, dijeron los testigos. Ningún grupo se había responsabilizado.
De ese combate otros civiles resultaron con heridas, según constató la televisión siria y otras fuentes, sin dar mayores precisiones. El embajador de Siria en Washington, Imad Mustafá, en declaraciones a la cadena de televisión norteamericana CNN, señaló: “Intentamos ver quién está detrás de estos actos terroristas”, declaró. “Hacemos lo que podemos contra la red Al Qaida. Compartimos el mismo enemigo” con Estados Unidos, añadió. De hecho, el procedimiento del ataque tiene reminiscencias de las técnicas de simultaneidad de golpes de la red de Osama bin Laden. El grupo atacante habría llegado en dos coches, disparando dos veces contra un inmueble situado cerca de la Embajada de Canadá, llamado “el edificio de la ONU”, otrora de la organización. El edificio se incendió, según pudo comprobarse. Después de disparar el primer cohete, el comando se alejó del lugar y luego dio media vuelta y lanzó el segundo. Las fuerzas de seguridad que vigilaban los edificios diplomáticos abrieron fuego contra los atacantes, que comenzaron a efectuar disparos a discreción con fusiles de asalto y lanzacohetes. Alcanzaron a un microbús que no transportaba pasajeros –cuyo conductor logró escapar– y a tres coches estacionados, que se incendiaron, según la versión de los testigos. Luego, uno de los dos automóviles de los asaltantes saltó por los aires, dijeron. “Un grupo terrorista y saboteador abrió fuego indiscriminadamente en el barrio de Mazzeh”, indicó la agencia oficial Sana citando a una fuente de seguridad. “Los servicios de seguridad hicieron frente y controlan completamente la situación”, agregó.
Numerosos tiros de armas automáticas siguieron a las explosiones y las fuerzas del orden acordonaron completamente el barrio. Algunos habitantes señalaron que se había evacuado un campus universitario situado cerca del barrio de Mazzeh. Las líneas telefónicas estaban cortadas o saturadas y los teléfonos móviles casi no funcionaban. Desde Londres, un portavoz del Foreign Office informó de una explosión y de varios disparos en Damasco, cerca de las residencias de los embajadores de Gran Bretaña y de Irán. “Hubo una explosión y tiros cerca de la calle de Meze en proximidad de la residencia del embajador iraní y de la del embajador británico”, declaró el portavoz. “Ningún miembro del personal diplomático británico ha resultado herido. Seguimos investigando lo ocurrido”, agregó. Por su parte, una portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Canadá, Marie-Christine Lilkoff, afirmó que “no estaba al corriente de que haya víctimas canadienses” y que la explosión “no ha causado daños en la embajada”.
Se trata de los primeros incidentes de este tipo en la capital siria en la que reinaba la calma desde la década de 1980, cuando fue blanco de una serie de atentados organizados por los Hermanos Musulmanes. Marie Okabe, portavoz de la ONU en Nueva York, indicó que “las oficinas de la ONU no han sido alcanzadas, todo el personal está ileso”. Añadió que las Naciones Unidas ya no ocupaban ese edificio “desde hacía un tiempo”.

Compartir: 

Twitter

Policías sirios custodian el edificio de la ONU.
 
EL MUNDO
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.