La Semana Social convocada por la Iglesia Católica, que reunió en Mar del Plata a dirigentes políticos y sindicales de todos los sectores, concluyó con un llamado a “crecer en la amistad social” y expresando el compromiso de “promover el desarrollo integral y erradicar la pobreza”, camino al Bicentenario del 2016.

El cónclave fue organizado por la comisión episcopal de Pastoral Social, que encabeza Jorge Lozano, y tenía como lema: “El papa Francisco y la cuestión social”. Entre otros, participaron los dirigentes que encabezan las tres CGT, Hugo Moyano, Antonio Caló y Luis Barrionuevo, y los que están al frente de las dos CTA, Hugo Yasky y Pablo Micheli.

El mensaje final decía: “Nuestra intención ha sido promover un espacio de diálogo para crecer en la amistad social”. La Pastoral Social expresó su preocupación por “todas las situaciones de exclusión que impiden que todos los ciudadanos puedan vivir con dignidad de hijos de Dios” y reconoce de “modo alarmante las nuevas formas de explotación y las consecuencias que genera un sistema económico global cada vez más desigual”.

La Pastoral se mostró a favor de “contribuir a generar mayor inclusión y encuentro”, por lo que ratificó su compromiso de “promover el desarrollo integral y erradicar la pobreza en este camino al Bicentenario del 2016, ya que como cristianos nos sentimos desafiados a sembrar auténtica esperanza frente a las múltiples situaciones de dolor que encontramos en la sociedad”.

“Nos han ayudado como guía los gestos de Francisco y sus enseñanzas, que nos iluminan acerca de la vida de las personas y los pueblos”, destaca el documento final.

En la misiva, señalaron un mensaje que recibieron de Jorge Bergoglio, en el que los llama a “ser fermento transformador en la construcción de un mundo mejor”. La Pastoral remarcó que es necesario “recuperar la vocación pública para servir a la construcción de la Nación”.