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La tendencia hacia la convergencia de los tipos de cambio de Brasil y Argentina está ayudando a despejar algunos de los principales problemas del intercambio bilateral. Entre los sectores que mayores controversias generaron durante los 90 se cuentan la producción de pollos y la de porcinos. Ahora, los productores de ambos países intentan ponerse de acuerdo en los flujos comerciales para evitar prácticas de deslealtad comercial sin recurrir a medidas arancelarias o paraarancelarias.
Esta semana, los titulares de las carteras de Agricultura de los países que integran el Mercosur intentarán en Río de Janeiro fijar nuevas pautas de regulación de los intercambios. Previamente, durante el fin de semana, los representantes del sector privado intentarán consensuar las propuestas que conciliarán los funcionarios.
Recientemente, el gobierno argentino se comprometió a revisar las denuncias sobre prácticas de dumping (exportar por debajo del precio de producción o del valor en el mercado interno) en el ingreso de pollos desde Brasil. Los funcionarios de Itamaraty pretenden que se abandonen las presentaciones realizadas ante la OMC, donde Argentina logró un primer dictamen favorable. Los negociadores del vecino país argumentan que los avicultores brasileños realizaron fuertes gastos para defenderse de las acusaciones argentinas y que ahora esperan un acuerdo comercial razonable para recuperar las pérdidas.
En cuanto a los porcinos, los productores argentinos aseguraron que las pruebas presentadas demostraban prácticas de dumping del 12 al 42 por ciento en los precios de carnes y derivados. Brasil pretende también que se dé marcha atrás en estas investigaciones, las que en enero pasado habían sido aceptadas por la Secretaría de Comercio. El reconocimiento de la validez de las denuncias dio lugar a la aplicación de aranceles preventivos para la protección del mercado interno. Ahora estos gravámenes quedarían eliminados.
Pero con prescindencia de las quejas de los productores, la eliminación de los aranceles de protección y el abandono de las investigaciones de dumping no tendrán efecto comercial inmediato. La fuerte devaluación del peso en relación con el real constituye una barrera suficiente para la contención de las importaciones.