Satan Dealers

Scatter Records

En los tres discos y el ep que produjo la década pasada, el cuarteto sintetizó su propuesta en un rock sucio y prolijo, deudor de bandas como The Stooges, que sostuvo con fuertes presentaciones, como registró su disco en vivo en el bar The Roxy Live!, del año pasado. Pero, de a poco, Satan Dealers fue metiéndose en el power pop de la escuela de bandas como Posies, un sonido que aparece mejorado en su trabajo reciente. Conceptualizado alrededor del escape y la fuga, Canciones para desertar suena cristalino, pero no débil, y muestra mejor sus cualidades musicales. L. P.

Mancha de Rolando

Tocka Discos

El noveno disco del quinteto apareja sus batallas: militancia política, resistencia cultural y supervivencia emocional son los ejes en torno de los que orbitan quince temas nuevos y un cover de Los Fabulosos Cadillacs. Si bien no hay por qué distanciar al artista del ciudadano, es al enfrentarse a canciones personales y sus juegos entre corazón y cabeza cuando Quieto despunta temas redonditos. Historias urbanas como “Sola”, pedidos como “No me dejes”, clamores como “Los libres” y algunos debates internos como “Bla bla bla” o “Hielofuego” marcan esa pauta mejorada. L. P.

Rubín y Los Subtitulados

Superbien Records

El ruido de derrotas y cadenas es traducido por Sebastián Rubín y Los Subtitulados en su reciente quinto disco a un lenguaje de señas entre optimista y melancólico, casi siempre precioso. Folk, rock y pop conviven en la nueva obra de un combo prepotente al trabajar: si bien es su primer disco desde Desayuno de campeones (2009), Rubín y estos músicos igualmente trabajaron en proyectos colectivos (Los Campos Magnéticos) y personales. Lo que consiguen aquí es un tratado sobre las dudas, los desencuentros y las pérdidas, en el que la canción es el paradigma narrativo. L. P.