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Si fuera vagina sería la de...
Juliette Binoche.

Si fuera pene sería el de...
Joaquín Sabina.

Ojalá se inventaran los
preservativos de...
material invisible, inoloro, incoloro
e insípido.

Si mi cama hablara diría...
¡¡¡Fueraaaa!!!

Quisiera tener dos...
pequeñas, paradas y redondas nalgas.

Nadie lo sabe, pero en el baño,
inmediatamente después...
de bañarme, me miro un buen rato desnuda en el espejo.

¿Qué palabras no puede evitar
decir en ese momento?
Barbaridades irreproducibles.

¿A quién le gustaría ver en una porno?
A Alan Pauls.

¿Dónde se haría un agujero nuevo?
Entre medio de los senos.

¿Cuántos son multitud?
Una multitud.

¿Qué detalle bajo la ropa le saca las ganas?
Los slips turquesa con elástico
flojo y... los slips.

¿Cuál es su posición favorita?
Todas las que mi cuerpo aguante.
No soy muy atlética.

¿Qué es para usted un polvo mágico?
El que tengo con mi pareja.

¿Cómo le hace saber que es “ahí”?
De todas las formas posibles.

¿Cuándo miente?
Nunca. Que se esfuercen.

El tamaño no le importa salvo que...
no sepa dónde está. Esas cosas pasan...

¿Qué quiso siempre y nunca tuvo?
Un consolador.

Tiene que durar más que...
más que un suspiro...

pero menos que...
pero menos que un turno...

María Laura Rojas es actriz. Su paso por el teatro se registra en las puestas de La mirada de los monos, Seguros de vida (una rutina teatral), Federratas y Serengueti, esa vez como asistente de dirección. En la actualidad protagoniza La 45-No voy a llorar, de eso ya me cansé, melodrama de Cecilia Propato sobre la problemática silenciada de la violencia contra la mujer. (Teatro Del Nudo, jueves a las 21, Corrientes 1551.)