Otra vez el voto en blanco recuperó protagonismo en una elección en la provincia de Santa Fe. De acuerdo a los datos provisorios conocidos a las 23.30 de anoche, más del 15 por ciento de los electores habían decidido dejar el sobre sin boleta en lo que hace a la nominación de postulantes a la Casa Gris. Los guarismos se acentuaban aun más en la capital de la provincia, donde el blanco se elevó al 21 por ciento, mientras en Rosario se redujeron al 11 por ciento.

El más inmediato antecedente electoral, las legislativas del año 2005, marca también una tendencia que se puede repetir en las elecciones del 2 de setiembre próximo. Dos años atrás, en los comicios que consagraron el triunfo de la lista encabezada por Hermes Binner para diputado nacional por delante de la lista de Agustín Rossi, quedó en claro que la primera fuerza no la constituyó el Frente Progresista Cívico y Social sino el 38.3% del electorado que no votó por ningún candidato. De 2.252.535 personas habilitadas por entonces para votar en toda la provincia, casi 800 mil personas no habían votado por ningún candidato, mientras 625 mil optaron por el Frente Progresista. De las 1.651.761 personas que sí participaron del proceso electoral, 192.240 eligieron impugnar o votar en blanco (11.6%). En síntesis, en Santa Fe 793.014 personas no votaron a ninguno de los candidatos, contra las 625.335 que lo hicieron por el Frente Progresista (27.7%) y las 484.071 que eligieron al Frente para la Victoria (21.5%).

Por entonces, los datos coincidieron con el promedio nacional, que se ubicó en 35.4% según un informe del Instituto de Estudios y Formación de la Central de Trabajadores de Argentina (CTA). Sobre un total de 26.098.099 electores, 9.236.117 ciudadanos argentinos se ausentaron, votaron en blanco o impugnaron, mientras los candidatos alineados al gobierno de Néstor Kirchner cosecharon 6.808.305 votos en todo el país (26.1%).