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Domingo, 24 de febrero de 2008

CULTURA / ESPECTáCULOS › TEATRO. UN MOVIMIENTO DE APOYO QUE CUMPLE DIEZ AÑOS DE DURA LUCHA

Todo sea por promover que el espectador vuelva a las salas

Desde los "Ciclos de los Semimontados" hasta los "Talleres para el espectador"; todo se intentó en apoyo al teatro.

 Por Julio Cejas

Hace 10 años nacía en esta ciudad el "Movimiento de Apoyo al Teatro de Rosario", un reagrupamiento de actrices, actores y directores, impulsados por el firme propósito de consolidar viejas conquistas y estimular el retorno de los espectadores a las salas. A poco de concretarse el festejo por la continuidad inquebrantable del movimiento, Rosario/12 dialogó con María Teresa Gordillo y varios de los integrantes del Movimiento acerca de la historia y los alcances de la movida.

"Haciendo un poco de historia la idea nace el 11 de diciembre de 1998 en el ya desaparecido Bar Vittorio que estaba a la entrada del Centro Cultural Bernardino Rivadavia, a instancias de Silvia Galizzi y Rubén Denino. Fue la primer reunión y a partir de allí surgieron los distintos planes, allí marcamos los objetivos, para qué nos juntábamos, y esto se fue dando a medida que íbamos analizando la problemática teatral desde las distintas ópticas", empieza contando Gordillo.

En principio este movimiento reclutó a teatristas provenientes de diferentes elencos que tenían distintas visiones, pero que coincidían en un objetivo básico: Tratar de llevar más público al teatro. Entre una de las primeras actividades que todavía hoy se sigue realizando y a instancias de la actriz Juana Novelli, nace "La mesa de los sombreros", ubicada en algún tramo de la peatonal y que servía para difundir la actividad teatral rosarina.

"Fue una actitud muy prepotente -comenta Gordillo- porque no pedimos ningún permiso municipal para instalarnos, sabíamos que iban a multarnos en algún momento pero igual decidimos enfrentarlos y la pelea fue fuerte, aun hoy pasan y nos dicen cosas, pero ya tenemos la Ordenanza donde se libera al teatro independiente de Rosario de todos los impuestos sobre volantes y afiches que estén detrás de un vidrio o adentro de un local".

La primer conquista del Movimiento que data de fines de los 90' se produce al establecer contacto con algunos miembros del Concejo Deliberante, contando con la firma de nombres como Rossi y Gianni, entre otros, a instancia de la concejal Gladis Comba. A partir de ese momento se comunica a todas las salas existentes, la vigencia de este preciado decreto. "Después -agregan- nace el Taller de Espectadores llamado Oscar Molinero en homenaje al actor fallecido, una actividad que se hacía una vez por semana en el Sindicato del Seguro a cargo de Roberto Alloco Garin. Era muy interesante y convocaba a mucha gente que después de ir a ver alguna obra que se consensuaba entre todos, se reunían para debatir y analizar con la coordinación de Garin".

Otra de las actividades que instala el Movimiento de Apoyo al teatro de Rosario fue el "Ciclo de los Semimontados", que se inician en el 99 y que presenta otra alternativa diferente a la del teatro en sala. "Es como el teatro leído -﷓apuntan-﷓ con la diferencia de que los actores tienen el libreto en la mano pero se mueven, tienen vestuario, hay música y utilería, y en algunos casos se hacían fuera del circuito céntrico, por ejemplo Rebelión en la playa de estacionamiento, obra de José Moset, fue una de las que salió a los barrios".

Según comentan los organizadores de estos Ciclos, se realizaban por iniciativa propia y no contaron nunca con el subsidio de alguna entidad oficial. "A pesar de todo, iba bastante gente, llegamos a realizarlo hasta el año pasado y se retoman este año con un homenaje al primer Teatro Abierto del 82', con la puesta de algunas obras de ese ciclo. No es fácil juntar a los actores y directores porque es una actividad extra a la que vienen desarrollando".

A esto hay que sumar la particularidad ideada por el Movimiento de incluir siempre en estas actividades a actores que ya se han alejado del oficio o se han jubilado, como forma de alentarlos y mixturarlos con los que continúan trabajando. "De allí nace -agregan- el `Rescate de estrellas`, una propuesta en la que se seleccionan, una vez al año, tres o cuatro obras cortas en las que participan actores que ya no están actuando o los más grandes, y lo hacemos en salas que nos prestan".

El año pasado en la Sala Amigos del Arte participaron Diana Pesoa, Carmen Russo, Graciela Donel, Víctor Bertolino y Carlos Martínez, todos de una larga trayectoria en el medio. Según Omar Tiberti "se trata de convencerlos para que actúen ya que el objetivo es rescatarlos y evitar que caigan en el ostracismo, darles una motivación para volver a una tarea que a ellos los convocó toda la vida".

"El Movimiento -acota- eligió tres obras de temporada: Tiempos difíciles de Tito Cossa, Trabajo pesado (Tosca callejera) de Máximo Soto y La quinta estación de Mario Cura, que se estrena este año". Más allá de todas estas iniciativas, el Movimiento reconoce con orgullo ser el responsable de la única celebración que se realiza en conmemoración del Día del Teatro Nacional. "Gracias a nuestra gestión, Rosario es la única ciudad del país donde se festeja este día, fiesta en la que no sólo incluimos al teatro sino también a la danza y al varieté ya que la gente de Variedades quedó muy olvidada, en eso nos ayudó la cantante Delia Rodríguez, `La Chaqueñita`, que fue durante muchos años dirigente del Sindicato de Variedades y tenía la lista completa de artistas".

El año pasado el Movimiento de Apoyo al Teatro de Rosario dejó de reunirse en bares para contar con su propio local que se encuentra en el Primer piso de calle San Lorenzo 2233, gracias a la gestión de la entonces Secretaria de Cultura de la Municipalidad. A partir de centralizar la actividad en su flamante local, la entidad se prepara para abordar nuevos emprendimientos que a partir de este año cobrarán nuevo impulso.

"Tenemos tres objetivos grandes a largo plazo -acotan-. El primero es el Museo del Teatro Independiente, el segundo La Casa del Teatro y el último, y no menos complicado, la conformación de un elenco oficial dependiente de la Municipalidad de Rosario". Para el Museo del teatro independiente se han ido recopilando materiales que incluyen fotos, programas, vestuarios, reconocimientos y todos los elementos que ayuden a preservar la memoria del teatro local.

Al referirse al tema de La Casa del Teatro, Ana Provenzano planteó a Rosario/12: "La idea de revertir la situación de soledad que atraviesan muchos compañeros al llegar a determinada edad y poder brindarle los cuidados necesarios, ya que no cuentan con ninguna ayuda para paliar el estado en el que se encuentran, a diferencia de los actores en actividad, que tienen otro trabajo para sostenerse, los antiguos vivían sólo de eso. Necesitamos un local que sirva no sólo de casa para alojar gente, sino en la que los jóvenes se puedan reunir e intercambiar, aprender de los mayores".

En lo inmediato, los integrantes del Movimiento se están reuniendo con los concejales para tratar el tema del elenco oficial que es un viejo reclamo de diferentes sectores del movimiento teatral rosarino y que pareciera estar ahora mejor encaminado. "Dada la proyección que tiene la ciudad -apunta Tiberti-, reconocida desde el exterior, es oportuna la idea de un elenco oficial de teatro dependiente de la Municipalidad. Para eso elaboramos un anteproyecto que presentamos planteándolo no sólo como motivo de atracción para el turismo sino para llenar un vacío que es la creación del público que hoy no tenemos".

El proyecto según sus responsables modificaría en parte la idea que se tiene en la actualidad del teatro para las escuelas, ya que a partir de la creación de un elenco oficial, los alumnos concurrirían al teatro para ver una obra en el sitio genuino en el que fue generada.

"Las escuelas oficiales -plantean- tienen que ir al teatro y no al revés, los alumnos tienen que sentarse en una butaca, ver cómo se hace en la sala y con autores que testimonien nuestro modo de vida".

El sitio elegido como sede del elenco oficial sería nada menos que el Teatro La Comedia, que según los responsable del proyecto sería por su historia el ámbito ideal. Frente a los riesgos que han corrido las ya tradicionales Comedias oficiales de distintas ciudades, fosilizando a determinados actores, los integrantes del Movimiento plantean una alternativa dinámica.

"Todo el mundo tiene miedo de que el actor quede en relación de dependencia, pero hay una modalidad en el Ministerio de Trabajo que sirve para contratar por determinado trabajo y un tiempo limitado, ya hablamos con Actores para adjuntar el convenio del sindicato y hacer un presupuesto de una obra normal con seis o siete actores".

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"La mesa de los sombreros", una "actitud muy prepotente que dio buenos resultados", aseguran.
 
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