rosario

Viernes, 12 de agosto de 2011

CORREO

Prioridad

Muchos no quieren darse cuenta y otros no se han dado cuenta, pero indudablemente la optimización del sistema educativo es la clave para el pleno desarrollo de un país. Por eso, es tan indispensable orientar las políticas de gobierno hacia una mejor calidad en los distintos niveles académicos y un mayor presupuesto para ser destinado al aspecto edilicio y pedagógico.

La educación no debe ser considerada como una mercancía. Vemos con gran preocupación el caso chileno, donde miles de estudiantes padecen la represión del gobierno de Sebastián Piñera por oponerse a un sistema privado que desconoce la educación pública, es decir se pretende el arancelamiento en todas las modalidades de estudio.

Días pasados, leía cómo el mundo está asombrado por el crecimiento de China, de Asia en general. Decía el informe que el sistema educativo de China es de doble jornada obligatoria, con 220 días de clases por año, y con un ausentismo docente que no supera el 5 por ciento. Además, los docentes se capacitan constantemente; particularmente en las ciencias tecnológicas, matemáticas, física, química, electrónica y computación. Esto porque, aseguran, los maestros están concientizados de que son los creadores de las personas trabajadoras en un futuro cercano.

Los países asiáticos cuentan con 220 días de clases anuales, están arribando a más de 1500 horas anuales de conocimientos a cada alumno. Los Estados Unidos y Europa mantienen un promedio de 1000 horas anuales de transmisión de conocimientos a cada alumno. ¿Y en países latinoamericanos? Apenas supera las 600 horas anuales de absorción de conocimientos por alumno.

No es tan difícil entender por qué en determinadas naciones hay muy buenos recursos humanos y en otras éstos escasean. Los funcionarios deberían estar preocupados por el presente y futuro de todos los ciudadanos, aumentar los recursos económicos a las escuelas y universidades del país, definir acciones para un mayor perfeccionamiento docente, determinar que en los ámbitos académicos exista siempre una formación profesional; de modo que los alumnos puedan insertarse en el mercado de trabajo.

Que hace falta un cambio de mentalidad, es cierto. Sin embargo también se necesitan gobernantes que le otorguen prioridad a la educación. La educación es el puntapié inicial del crecimiento de una nación, quien no lo entienda así habrá incurrido en un error grave. Ahora bien, aquellos que se hacen los distraídos y miran para otro lado es porque privilegian sus intereses y no los de las mayorías.

Marcelo Malvestitti

Compartir: 

Twitter

 
ROSARIO12
 indice

Logo de Página/12

© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados

Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.