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Jueves, 16 de febrero de 2006

PSICOLOGíA › NIÑOS AFECTADOS POR EL MALESTAR DE EPOCA

Un dispositivo que da que hablar

 Por Andrea Ponganessi y Eugenia Crivelli *

En el Hospital General de Niños Dr. Pedro Elizalde, ex Casa Cuna, de la ciudad de Buenos aires, un grupo de psicoanalistas nos convocamos en torno a un interés compartido. Este era el armado de pequeños grupos de niños que padecían síntomas propios de la época, donde el lazo social estaba afectado, estos son los Fenómenos Psicosomáticos, Ataques de Pánico y Trastornos del lenguaje.

Este trabajo comenzó a realizarse a comienzos del año 2003, pero ya desde el año 1995, a pedido de los Dermatólogos, funcionaban reuniones con los pacientes atendidos en su Servicio. Los mismos estaban coordinados por la Lic. Andrea Cucagna, del Servicio de Psicopatología. Estas reuniones tenían como fin trabajar la derivación correspondiente al Servicio de Psicopatología, ya que los médicos experimentaban que los pacientes al ser derivados decían sentirse "abandonados". A partir de los efectos que se producían en algunos pacientes en estas reuniones, fue que la Lic. Andrea Cucagna con un grupo de psicoanalistas pensamos en armar un dispositivo grupal dentro del Servicio de Psicopatología.

El encuentro con el trabajo de Massimo Recalcati nos orientó respecto del armado del nuevo dispositivo. Los llamados grupos monosintomáticos consisten en pequeños grupos formados por pacientes que padecen el mismo síntoma. La homogeneidad del síntoma es sin embargo una ilusión. El pequeño grupo, se constituye sobre esa ilusión. Aquello que da contenido al grupo es un lazo imaginario, una reciprocidad identificatoria, un espejismo. A su vez deja de existir lo particular del sujeto, promoviendo la heterogeneidad, no asimilable a ninguna fusión identificatoria. El grupo entonces no se sostiene bajo la mirada absoluta del Ideal ni sobre la ¿semejanza imaginaria? Que deriva de la identificación con el Ideal, sino de un lazo social reducido al trabajo común.

En la época contemporánea existe una nueva configuración del lazo social, en la que vacila o fracasa la relación del sujeto con el Otro. Las nuevas soluciones sintomáticas no se constituyen en torno al deseo inconsciente del sujeto y a la dialéctica de represeión retorno de lo reprimido, sino que se configura con relación a la identidad misma del sujeto. Le confieren una insignia que ofrece al sujeto una identidad, englobándolo en un conjunto homogéneo. Se puede oservar en la actualidad como se organizan espontánemanete agrupamientos en torno a un misma modalidad de goce, le procuran una solución esquivando la falta en ser, y el subsiguiente encuentro con el Otro.

El dispositivo grupal es una estrategia posible para alojar el modo de presentación de los nuevos síntomas. La dificultad con la que nos encontramos es que el sujeto queda silenciado detrás de la insignia. El dispositivo se ofrece entonces como un espacio previo a lo preliminar de un tratamiento, donde se pone en forma una demanda posible dirigida a Otro

La recopilación de los trabajos, producto de esta experiencia, dieron por resultado la edición de Ecos y Matices en Psicoanálisis Aplicado. Clínica de la psicosis, la fobia, el FPS y el pequeño Grupo. Compiladora Andrea Cucagna. Serie Praxia. Ediciones Crama.

* Licenciadas en Psicología. Nota publicada en Hospitálisis nº 2, 11/2005.

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