Un grupo de diplomáticos presionan para que la asociación que los nuclea contraten a los macristas Monzó, Frigerio y Massot para que operen en contra del proyecto que enviará el oficialismo al Congreso
Al menos ocho integrantes del sector están desembarcando en el Gobierno porteño. Entre ellos, Nicolás Massot en el Banco Ciudad y Lucas Delfino en la subsecretaría general.
Ministros y otros funcionarios serán convocados según los temas que se traten. De todos modos, Frigerio y Lacunza serán los principales interlocutores con los equipos de Alberto Fernández. Marcos Peña no participará.
Para el Frente de Todos más que la velocidad lo que importa es la certeza de los datos que arroje el recuento de los votos.
Su principal reclamo tiene que ver con el maltrato de parte de la Policía, las instituciones educativas; también reclaman por la falta de acceso a la salud, y la pobreza.
Los científicos convocaron a la sociedad para contarle qué investigan y por qué es fundamental que el Estado los apoye.
Tras la ola de críticas, el diputado Marcos Cleri (FpV-PJ) adelantó que reunirán a la comisión que debe evaluar la validez del decreto. El massismo insistirá con su proyecto de ley. Frigerio dijo que se puede debatir “si hay consenso” pero ratificó el DNU.
La trama que posibilitó ese negociado llega hasta Frigerio y Macri. Cuando el Presidente era jefe de Gobierno y el ministro dirigía el Banco Ciudad, esa entidad otorgó un préstamo millonario para construir el estadio a una empresa que sólo tenía un empleado registrado.
Tras la exposición de Frigerio, Cambiemos consiguió 9 firmas. Los peronistas Pichetto y Mayans se trensaron en un acalorado debate.
Con el dólar un poco más estable, el Presidente analizó con distintos ministros las medidas que se comunicarán el lunes. La mirada sigue depositada en Peña y no se descartan anuncios durante el fin de semana. La visita de Durán Barba.