En 2013, el primer año de aplicación de la ley, consultaron 7657 mujeres en los servicios de interrupción legal de embarazo. Año a año esa cifra fue aumentando. En 2016, el último dato disponible, fueron 10.304 mujeres, de las cuales, 9719 abortaron: casi el 83 por ciento, tenía 20 años o más; un 16 por ciento, entre 15 y 19 años, y 0,8 por ciento (74), menos de esa edad. 

Para comparar con otros países la cantidad de abortos que se practican, se toma en cuenta la tasa de interrupciones de embarazo cada 1000 mujeres de 15 a 44 años. En Uruguay, es de 11,53 –aunque se presume que un número significativo sigue recurriendo a la clandestinidad (ver aparte)–, similar por ejemplo a la de España, donde es de 10,36. En cambio, en Argentina, sería casi 6 veces más alta, oscilaría entre 40 y 65 IVE cada 1000 mujeres de esas edades, de acuerdo con un estudio solicitado por el Ministerio de Salud de la Nación a las demógrafas Alejandra Pantelides y Silvia Mario y elaborado en base a datos del año 2000.