El juzgado en lo Contencioso Administrativo 1 de Dolores ordenó detener la construcción de un corralón que realizaba el municipio de Villa Gesell, en Mar Azul, por violación del código urbanístico, al hacer lugar a un amparo. “Se presentó un amparo por la construcción de un galpón municipal donde el código urbano lo prohíbe”, explicó la abogada Patricia Escofet. En la zona hay una escuela rural y un jardín de infantes, con el agua contaminada. Escofet contó que la respuesta del municipio cuando se detectó el año pasado que hubo muchos chicos con problemas de gastroenteritis fue “sacar todos los grifos y que el Consejo Escolar ponga agua en bidones”.La letrada, que es también vecina del lugar, señaló que “se hizo un planteo formal a la municipalidad y no contestaron, negaron lo que ocurría y dijeron que en un predio fiscal pueden instalar lo que quieran. Para nosotros un corralón municipal significa una construcción importante y para llegar allí tuvieron que abrir calles en un lugar contaminado. Pero lo más serio es que abren una calle sobre residuos tóxicos activos (televisores, electrónicas, partes de filtros) en un lugar