La policía porteña reprimió con gases lacrimógenos a manifestantes, la mayoría de ATE Capital, que fueron a la Comisaría 30ª, en Barracas, para solidarizarse con los 16 trabajadores del subte detenidos y acusados de “atentado” y “resistencia a la autoridad”. “Cuando logramos ingresar a la comisaría para entrevistarnos con los detenidos, la policía sale del interior y, con la infantería comienzan a utilizar gas pimienta y a reprimir a nuestros compañeros. Tenemos tres compañeros que están hospitalizados”, aseguró Daniel Catalano, secretario general de ATE Capital. Legisladores porteños como Victoria Montenegro, dirigentes sindicales y referentes de los derechos humanos y de organizaciones sociales se acercaron a la puerta de la comisaría para exigir la liberación de los trabajadores. A pesar de los incidentes, algunos manifestantes pudieron ingresar a la comisaría, como Hebe de Bonafini, titular de la Asociación Madres de Plaza de Mayo. “Logramos volver a entrar, logramos que entre Hebe de Bonafini, que se entrevistó con la mayoría de los compañeros que fueron privados de la libertad”, contó Catalano.
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