La pasión política de Antoni Traveria por América Latina era visceral. Su hija se llama Amanda por la canción del cantautor chileno Víctor Jara, asesinado por el dictador Augusto Pinochet. El periodista y profesor universitario, director general de Casa América Catalunya con sede en Barcelona desde 2004 –un centro de estudio y reflexión sobre el continente latinoamericano–, murió anteayer a los 61 años a causa de una larga enfermedad. “Esta noche Toni ha dejado de sufrir y seguro que ha cogido un micrófono para perseguir a Fidel o está bajando una pista negra en Cervinia. Brindemos con Coca-Cola Zero porque por una vez haya podido huir de las garras del monstruo”, escribió su familia para informar el fallecimiento de Traveria, un periodista catalán preocupado por la situación económica y política de nuestro país, como lo demuestra el último artículo que publicó, el pasado 9 de mayo en El Periódico, titulado “Argentina depende una vez más del FMI”.

Licenciado en Ciencias de la Información por la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), Traveria fue corresponsal de TVE de Catalunya en países de América del Sur entre 1988 y 1990. Durante su carrera ejerció diversos cargos de responsabilidad en Radio Nacional de España y Televisión Española en Catalunya y Baleares. Fue nombrado director de contenidos e información del Fórum Internacional de las Culturas 2004 celebrado en Barcelona. En diciembre de 2004 asumió como director general del entonces Instituto Catalán de Cooperación Iberoamericana (ICCI), heredero de la Casa de América de Barcelona nacida en 1911. Uno de los logros de Traveria fue la refundación de la entidad como Fundación Casa América Catalunya, desde la cual durante estos casi 14 años ha organizado e impulsado cientos de actividades culturales para difundir la riqueza de América Latina y El Caribe. Como docente fue profesor asociado de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Autónoma de Barcelona y de la Universidad Ramon Llull.

La Casa América Catalunya dirigida por Traveria fue premiada con la Creu de Sant Jordi, en el 2011, y con la Medalla d’Or al Mèrit Cívic, concedida en el 2012 de forma unánime por el pleno del Ayuntamiento de Barcelona “en reconocimiento a su trayectoria, durante la cual ha reforzado los lazos que unen Latinoamérica y Catalunya, entendiendo la cultura como un vínculo y una herramienta para conocer y acercar las realidades de los pueblos de un lado y otro del Atlántico”. En 2005 creó el Premio Casa América Catalunya a la Libertad de Expresión en Iberoamérica, dirigido a informadores y colectivos periodísticos de la región. En 2007 Traveria decidió otorgar este reconocimiento a PáginaI12, el año en que el diario cumplió 20 años. “El 25 de marzo de 1977, hace treinta años, moría asesinado por un grupo de policías y militares Rodolfo Walsh. Este año hubiera cumplido ochenta años. Casi con seguridad, y si me permiten el atrevimiento, yo diría que si Walsh hubiese seguido con vida también hubiera escrito en PáginaI12”, dijo entonces Traveria.

El expresidente chileno Ricardo Lagos destacó el “puente sobre el Atlántico” que tendió entre América Latina y la península Ibérica el periodista y profesor español. “Desde la Casa América Catalunya, (Traveria) entendía que era un puente entre su Cataluña querida y América Latina, con un sentido del rol de Iberoamérica en tanto esta es más fuerte que la península Ibérica y que América Latina separadas”, afirmó Lagos y agregó que la institución que dirigió Traveria era “un puente grande sobre el Atlántico para comprendernos mejor y pensar más en el mundo”. Lagos se despidió con un agradecimiento al director de Casa América Catalunya: “Gracias, Antoni, por lo que hiciste, por tu entrega, por tu vocación de un ideal superior. Esperemos que otros puedan seguir lo que hiciste con la fuerza que lo hacías, con la dedicación con la cual trabajadas cada día”. Las Abuelas de Plaza de Mayo –que el año pasado recibieron el premio Joan Alsina de Derechos Humanos, otro galardón creado por el periodista y profesor español– se despidieron “con profunda tristeza de nuestro amigo Antoni Traveria, quien siempre tendió su mano solidaria para difundir la búsqueda de nuestros nietos y nietas en Europa”.