En la audiencia en el Senado por el aborto, se denunció presión eclesiástica y hubo tensión
El poder al que nadie había nombrado
Una de las expositoras aseguró que la Iglesia declaró la guerra cuando comenzó el debate por la legalización. Suspicacias cruzadas porque senadoras antiderechos sugieren que los oradores pro-ley obedecen a intereses económicos foráneos.
















