LA PAMPA POTENCIA SUB 20
Por Mónica Molina
La batalla se libra ahora en el Senado. Los representantes por La Pampa pueden volver a tener su incidencia inclinando la balanza a favor de la legalización del aborto y, tanto en el fuero interno como dicho a viva voz, se espera que ocurra lo que paso en la Cámara baja y, al fin, la democracia salde una deuda con las mujeres.
Exactamente al mes de la votación en Diputados, desde la página “pampeanos por la vida”, vino el ataque a Florencia de la V. “En La Pampa no queremos personas abortistas, han cobrado para sus campañas a favor de la muerte. Nos negamos a financiar promotores del aborto. Rechazo total en La Pampa. Que se vayan”.
La virulencia de los “antiderechos” intimida, amenaza y agrede, la pibada lo sabe. Son ellas, ellos, elles, el lenguaje inclusivo no es una rareza y hablan sin titubear. Tienen entre 15 y 16 años. Luna, Sofía, Alejo, Aylen y le ponen el rostro y la palabra a su lucha, cuestión que le reclaman a los “antiderechos” pampeanos que permanecen más en el anonimato. Integran la organización estudiantil “16 de Setiembre”, surgieron con el objetivo puesto en conformar el centro de estudiantes en sus colegios, aunque en el camino otras luchas se cruzaron. Pertenecen a colegios secundarios privados, confesionales y estatales.
Plantados en un discurso tan potente como sólido en sus argumentos organizaron el “Pañuelazo en sororidad” con Florencia de la V en el Teatro Español el pasado 14 de julio, la actriz emocionada en medio de la calle, les agradeció: “me dejaron sin palabras, voy a guardar este momento para siempre”. La pibada lo había hecho.
“A nadie le gusta que le digan abortista o abortero” dice Aylen, alumna del Liceo Informático, porque es una “realidad que pasa y, si pasa que sea de manera segura, porque se mueren pibas”. Alrededor de una mesa escuchan atentamente cada argumento de su par. Sofía, asiste al Colegio Domingo Savio, institución donde impulsaron los pañuelazos. Como una ironía, dice “en casi todas las clases se habla del debate sobre el aborto”. Ella, le devuelve los términos a los “antiderechos” y retruca: “campaña de la muerte es lo que están haciendo ellos. Porque con la postura en contra de la legalización permiten que sigan muriendo las chicas”.
Alejo, es estudiante del colegio 9 de Julio, retoma lo de su compañera y sostiene que, por el contrario, “nosotros somos los promotores de la vida”. “Podes estar a favor o en contra pero la pibada -opina Sofía-. Pero ya paso esta época de subestimarnos, que no sabemos nada de la vida porque no tenemos experiencia, es crucial, pero no es lo único que hace al saber, y la experiencia no es solo la edad”, con elocuencia define Sofía.
Luna, alumna del colegio de la UNLPam critica los argumentos de quienes sostienen la inviabilidad de pagar la practica de IVE en el hospital publico.
Sin dudas, el debate del aborto impregno todas las agendas, la de la dirigencia política que hasta hace poco tiempo esquivaba el tema, hoy no puede especular. Gran parte de la sociedad esta en ebullición y, en este contexto, la mirada de quienes transcurren la adolescencia tiene un alto protagonismo en la demanda por aborto seguro, legal y gratuito.
Valoran que el debate en el colegio es súper, súper fuerte y esta presente todo el tiempo. Con muchos puntos de vista. A su vez, que el debate ahora es “muy serio” y, el profesorado da lugar al debate en materias como ciudadanía o historia porque están relacionadas a los derechos.
La pibada pampeana ha tenido una masiva explosión en la lucha feminista. No hay mochila, cuello o muñeca que no esté rodeada de un pañuelo verde.
En los cimentos de esta lucha, esta el camino construido por el Foro Pampeano por la legalización del aborto. Es una referencia obligada por su incidencia a favor de este derecho tanto para la prensa como en distintos sectores de la sociedad. Mirta Fiorucci, una histórica militante del Foro analiza cómo este debate ha permeado los distintos sectores en la sociedad y, destaca el compromiso asumido por las y los periodistas. A su vez, la incidencia lograda permitió ampliar las alianzas con profesionales de la salud, con sectores estudiantiles e hilvanar en esta etapa con las mujeres militantes de los partidos mayoritarios en la provincia, tanto mujeres radicales como justicialistas.
El entusiasmo de los y las chicas contagia, a pesar de la cautela de las militantes feministas con más experiencia, sabedoras de los tiempos, de la espera para alcanzar pequeños pasos.
La pibada asumió también el cabildeo como una herramienta para expresarle su postura a quienes nos representan en el Senado y quieren que se les escuche.
CHACO CON EL PODER DEL ENCUENTRO
Por Frente de Trabajadoras de la Comunicación, desde Resistencia
Las organizaciones feministas y en defensa de los derechos humanos en el Chaco se pusieron al hombro la militancia por la aprobación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo. Todas las semanas se realizan pañuelazos en la plaza central de Resistencia y el pasado jueves 19 de julio, cientos de personas coparon con sus pañuelos verdes el predio donde se realizó la Bienal Internacional de Esculturas, un evento cultural que a lo largo de su historia reunió a cientos de miles de personas de la Argentina y del mundo.
Además, este martes 24 de julio, la provincia se unió al puentazo federal en un abrazo con su vecina Corrientes, a través del puente General Belgrano que cruza las aguas del río Paraná.
En junio, en la Cámara de Diputados de la provincia se realizó una jornada con más de 200 expositoras y expositores que brindaron información sobre el proyecto de ley que tiene media sanción. Las exposiciones fueron entregadas tanto a la Cámara de Diputados de la Nación como a la Cámara de Senadores.
Los grupos antiderechos, liderados por representantes tanto de la Iglesia Católica como Evangelista, buscan como en todas partes de la Argentina, infundir temor a través de agresiones como las que vivieron un grupo de encuentreras, al finalizar el 32° ENM quienes fueron apedreadas, insultadas y golpeadas por grupos “Pro Vida”; un acto intimidatorio que se volvió a repetir varias veces en la provincia.
El párroco Rafael Del Blanco, de la Parroquia Santísima Trinidad de Resistencia –conocido por realizar misas sanadoras– tomó trascendencia en las últimas semanas debido a audios que él mismo envió por whatsapp a sus feligreses con contenidos repletos de falacias y con palabras discriminatorias hacia el colectivo de identidades diversas, a tal punto que tuvo que salir a aclarar que “le había llegado información errónea”, tras haber recibido un tirón de oreja por mentir sobre actividades que supuestamente realizaría el ministro de Salud, Julio Zapico, a quien el padre sindicaba como promotor de la ley.
Tal es el grado de violencia que ejerce el cura –devenido en mediático–, que amenazó a diputados y diputadas que votaron la media sanción, a senadores y senadoras y al propio presidente de la República, asegurando que el castigo sería una excomunión automática.
Inclusive, la diputada nacional radical Aída Ayala –que había apoyado el proyecto en la Cámara Baja–, en declaraciones a un medio local, aseguró haber recibido muchos llamados por parte de integrantes de la Iglesia Católica y que eso la haría cambiar su voto si el proyecto volviera a Diputados.
En el Chaco, el movimiento feminista se fortaleció desde la realización del 32° ENM. En distintos espacios, tanto laborales, como sociales, culturales y gremiales, las mujeres lograron organizarse para conformar cuadrillas de lucha para el empoderamiento feminista tanto en el ámbito docente como el de las Trabajadoras Sociales por el Derecho a Decidir, el Ateneo Feminista de Trabajo Social y el de la Red de Profesionales de la Salud, así como el Frente de Trabajadoras de la Comunicación del Chaco; todos espacios que coinciden en un aspecto general pero que militan las particularidades de cada profesión.
Desde este último espacio, se viene gestando desde antes del 13 de junio y con mayor énfasis en las últimas semanas, campañas de difusión tanto en los medios de comunicación como a través de las redes sociales para poder obtener el voto a favor del radical Ángel Rozas, quien, según sus asesores, se niega a atender a la prensa por este asunto, y es el único senador indeciso de la provincia, ya que Eduardo Aguilar y María Inés Pilatti Vergara ya anticiparon su voto positivo.
#AbortoLegal Mientras en Rosario la muerte por abortos clandestinos se redujeron a cero, en otros lugares de la provincia de los contrastes, las presiones de la Iglesia obstaculizan las políticas públicas y condicionan dos de los tres votos santafecinos.
SANTA FE DE VOTOS Y LOGROS
Por Sonia Tessa, desde Rosario
Con un gran pañuelazo el 4 de agosto en el Monumento a la Bandera, la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto de Rosario volverá a poner en la escena nacional una foto impactante: llegarán banderas de todos los pueblos y localidades del sur de la bota para decir que la legalización no es un tema metropolitano. La provincia es muy extensa, con polos bastante diferenciados: la ciudad del sur, Rosario, la más importante, suma a los lineamientos del gobierno santafesino para la provisión de la Interrupción Legal del Embarazo, una política pública consistente desde hace décadas, que permitió la eliminación de las muertes por aborto clandestino desde 2012. En Rosario se aplica el Protocolo de Interrupción Legal del Embarazo con una interpretación amplia de la causal salud, se hacen abortos con misoprostol pero también con Aspiración Manual Endouterina (AMEU), a elección de la usuaria. Y consejerías pos abortos para que la persona gestante se lleve un método anticonceptivo de larga duración sin costo. En cada uno de los centros de atención primaria de la salud se garantiza la provisión de anticonceptivos desde 1997, año en el Rosario que tuvo su pionera ordenanza de salud sexual y reproductiva. Años después, esa política se puso en marcha también en toda Santa Fe, desde el ministerio de Salud provincial, pero las resistencias son mayores en localidades más pequeñas, o más atravesadas por el poder eclesiástico, como Rafaela y Santa Fe.
En 2015, la provincia adhirió por ley al protocolo de ILE del Ministerio de Salud de la Nación. El Laboratorio público LIF está produciendo misoprostol, que estará en los centros de salud en diciembre. Mientras tanto, los sectores antiderechos resisten desde adentro de algunos centros de salud. Rosario es una ciudad laica donde tienen la capacidad de acción más limitada. Y la red de profesionales de la salud por el derecho a decidir tiene muy buena presencia en el sistema público. Ayer realizaron una asamblea para mostrar masividad. Muy distinta es la situación en Santa Fe. El hospital más importante de la ciudad es el Iturraspe –donde dejaron morir en 2007 a Ana María Acevedo porque no le permitieron interrumpir su embarazo ni le trataron el cáncer de maxilar porque estaba embarazada–. Ahí, todo el servicio de Ginecología y Obstetricia es objetor de conciencia, y además, desde adentro del centro asistencial brindan información solapada a la agrupación Ramón Carrillo para que obstaculice el acceso de las mujeres a sus derechos. Allí fueron las mujeres a hacer su pañuelazo la semana pasada, pese al frío, y cuando se iban les tiraron agua, para que entendieran el mensaje.
Mientras tanto, en el poroteo de los votos en la Cámara alta, la senadora nacional del Frente para la Victoria, María de los Angeles Sacnun, adelantó su voto positivo, y afirmó que la ley llega al Senado con una “enorme legitimidad”, el senador de Cambiemos Carlos Reutemann hizo saber que votará en contra. Y no sorprende teniendo en cuenta que tuvo como ministro de Salud a Fernando Bondesío, que en 2003 firmó una resolución para obligar a lxs medicxs de la provincia a denunciar a las mujeres que llegaban con complicaciones de aborto. La incógnita es Omar Perotti, senador justicialista que aún no dio a conocer su posición. Perotti fue durante ocho años intendente de Rafaela, una ciudad llamada la Perla del Oeste, por su pujanza económica. Esta semana, fue noticia por el escándalo que desató un grupo de fieles ante la presentación de la obra Dios, del director Lisandro Rodríguez, en homenaje a León Ferrari. En esa puesta en escena –que formó parte de la programación del Festival de Teatro de Rafaela–, se pusieron pañuelos verdes a la imagen de una virgen, y también a una estatua del papa Francisco. Una actriz y un actor, desnudos, que personificaban a Adán y Eva, también llevaban la insignia de la Campaña. Una parte de la ciudad puso el grito en el cielo, y amparados en la influencia del arzobispo Luis Fernández en la Municipalidad –declarada “pro-vida” por el concejo municipal– pidieron “la cabeza” de los organizadores del Festival, y que sea una comisión de vecinos la que elija las obras que participen. Desde la Asamblea Feminista expresaron: “Los aprietes nunca son las formas aunque parecen ser las únicas que entienden algunos grupos. Celebramos el teatro como hecho artístico que no es neutral ni se dirige a un público homogéneo. Es en su diversidad donde todos los colectivos y credos que habitamos la ciudad podemos sentirnxs identificadxs. Incluso cuando hay obras que a unxs nos generan rechazo, sabemos que como consecuencia de ser un objeto artístico, otrxs, diferentes a nosotrxs pueden estar disfrutándolo. Por tanto, tenemos la libertad de no ir, de levantarnos, de expresar que no es de nuestro gusto particular. Han llegado al Festival obras con contenido religioso que ningún ateo salió a repudiar. Entonces, ¿qué entendemos por libertad de culto y respeto? ¿Qué pretendemos que se respete?”.
Perotti navega en esa disyuntiva. Su ciudad es conservadora, aunque el movimiento feminista crece con fuerza, y los pañuelazos también congregan a muchas personas. Lanzado como candidato a gobernador, el senador tiene gran necesidad de obtener votos en Rosario, donde más del 60 por ciento de la población se manifiesta a favor de la ley de interrupción voluntaria del embarazo. Ante este panorama, por ahora, guarda silencio.
