Además de la represión, Ivana Henelaf fue víctima de discriminación. El abogado Carlos González Quintana, de la APDH, contó que la mujer “ingresó menstruando al calabozo, los policías advirtieron eso... Uno le dijo: ‘tomate tu propia sangre, india sucia’”. El abogado agregó que cuando las mapuche declaró ese episodio en la audiencia judicial en que se trató el caso, “un policía que custodia la seguridad de la sala (de origen mapuche) rompió en llanto y se tuvo que retirar”.