El Gobierno nacional aprobó una redeterminación de precios para la construcción y equipamiento de la primera etapa del Hospital Posadas, obra que comenzó en 2010 con el kirchnerismo y siguió durante la gestión de Mauricio Macri. Las compañías a cargo son Caputo S.A., SES y el Grupo Farallón Desarrollos Inmobiliarios. Las dos primeras son propiedad de Nicolás Caputo, amigo de la infancia del presidente Mauricio Macri, mientras que Farallon pertenece a Eduardo Ramón Gutiérrez.

En los considerandos de la resolución 38, fechada el 30 de diciembre y publicada el viernes, se afirma que el mencionado contrato de obra pública se vio afectado por “las variaciones acontecidas en la economía”, por lo que habiéndose cumplido los presupuestos fácticos establecidos por el Decreto 1295/02, entre los que se manifiesta una variación promedio de los precios del contrato superior al 10 por ciento, la Empresa solicitó se proceda a la Adecuación Provisoria de Precios.  Según la medida, los incrementos varían entre el 190 y el 335,9 por ciento, de acuerdo al tramo de obra. Para los gastos a partir del mes de septiembre de 2014, el incremento presupuestario es de 190,91 por ciento, número que asciende a 226,26 por ciento para mayo de 2015, luego 260,88 por ciento a partir de octubre de 2015 y finalmente de 335,96 por ciento desde abril de 2016. Los porcentajes se calculan tomando como referencia el monto estipulado por la licitación, de 176 millones en 2010. 

El Ministerio del Interior y Obras Públicas, además de redefinir los precios, extendió el plazo para finalizar la obra por otros 41 días corridos desde el vencimiento previsto para el 30 de noviembre de 2016. Por lo tanto, la fecha llegó hasta el pasado 10 de enero, acumulando cuatro prórrogas, dos con el kirchnerismo y dos con el macrismo. “En la ampliación de plazo anterior fueron subestimados los días necesarios para contar, tanto con la participación de los responsables de infraestructura, como de las personas destinadas para la capacitación de los equipos y manejo de las instalaciones muy complejas, encontrándose también demorada, por parte del Hospital la contratación del mantenimiento preventivo y correctivo de los ascensores, condición necesaria para cumplimentar con la habilitación municipal”, destacó la resolución.