“Hasta aca llegué, a 19 años de mi debut llegó el momento de terminar mi aventura como futbolista profesional”, anunció ayer el zaguero Nicolás Burdisso, de 37 años, a través de su cuenta de Instagram. “Gracias a todas las personas que me acompañaron en este viaje, a mi familia, compañeros y equipos que formé, entrenadores y, sobre todo, hinchas. El fútbol es mi instrumento para ser feliz y para crecer como persona y lo seguirá siendo. Estoy orgulloso y satisfecho: hice todo lo que soñé de niño”, agregó el ex defensor de Boca, Inter y la Selección, entre otros equipos. Burdisso hizo las inferiores en Newell’s pero debutó en Primera con Boca; luego tuvo un destacado paso por Italia. Disputó dos mundiales con la Selección: Alemania 2006 y Sudá- frica 2010, y fue campeón del mundo con la Sub 20 en Argentina 2001 y ganador del oro olímpico en Atenas 2004. 

Sin embargo, uno de los hechos destacados se dio fuera del campo de juego cuando se perdió casi toda la temporada 2004/05 con el Inter. En ese entonces, su hija Angelina tuvo leucemia y él decidió marcharse de Italia para estar en Buenos Aires junto a ella, sin importarle que podría haber perdido su lugar en uno de los clubes más prestigiosos del mundo.

Al tiempo y con ella en vías de recuperación, contó en varias entrevistas cómo fue la situación cuando se la planteó al dueño del Inter: “El me respondió sin palabras. Se conmovió. En ese momento entendí que tenía frente a mí al hombre con el corazón más grande que he encontrado en Italia. ‘Nicolás, haz lo que quieras, el Inter está a tu disposición’”.

A nivel clubes, el cordobés también jugó en la Roma, Genoa y Torino, donde su contrato había expirado a mediados de este año.

Con 18 títulos cosechados en su carrera, 11 nacionales –2 en Boca y 9 en Inter– y 7 internacionales  –5 con Boca y 2 con la Selección–, Burdisso es el sexto jugador argentino más ganador, detrás de Esteban Cambiasso, Alfredo Di Stéfano, Lionel Messi, Guillermo Barros Schelotto y Sebastián Battaglia.