Tamberos de la provincia de Buenos Aires se movilizaron ayer ante las plantas que la empresa La Serenísima tiene en las localidades de General Rodríguez y Trenque Lauquen. Afectados por una profunda crisis y ante la falta de respuesta del Gobierno, los productores lecheros protestaron ante el muy bajo precio que le paga la industria concentrada del sector. El reclamo fue convocado por la Sociedad Rural de Trenque Lauquen –localidad del oeste de Buenos Aires, sobre Ruta 5 y ya muy próxima al límite con La Pampa–, encuadrada en Carbap, pero contó con la adhesión de varias entidades de productores y no sólo de territorio bonaerense. Los productores denuncian la falta de una política lechera de parte del gobierno, que dejó en manos de la industria más concentrada el manejo del mercado y el control de los precios. Reclamaron, en tal sentido, un precio justo por la producción, que se vuelva a institucionalizar las relaciones dentro de la cadena, acceso al financiamiento y reducción de plazos en los pagos a productores, y una menor presión tributaria sobre la producción, el escalón más débil de la cadena.  Además de concentrarse frente a las plantas del principal establecimiento del sector, los productores también enviaron 300 vacas lecheras al mercado concentrador de Liniers, como una manifestación de que el sector está al límite de liquidar su capital y abandonar la actividad. Desde que asumió Cambiemos, ya desaparecieron más de dos mil tambos y sólo en el último año, fueron más de 600.