Con el debut de Jorge Almirón como técnico, San Lorenzo igualó sin tantos en Liniers ante Vélez, por la 12ª fecha de la Superliga. El encuentro debió jugarse en la noche del domingo, pero por el cambio de día del Superclásico copero a raíz de las intensas lluvias caídas, recién pudo disputarse ayer.

San Lorenzo –que perdió tres de las últimas cuatro presentaciones, sólo ganó dos partidos en el torneo y se ubica lejos de la punta– llegaba envuelto en una crisis que terminó con la salida de Claudio Biaggio de la conducción técnica, luego de la eliminación en la Copa Argentina a manos de Temperley. Para salir del mal momento, la dirigencia azulgrana apostó por Almirón, cuya primera medida fue que el experimentado arquero Sebastián Torrico, ya recuperado de una lesión en el hombro izquierdo sufrida en enero pasado, volviera a ocupar un lugar en el banco de los relevos. Por su parte, Vélez, de buena campaña, llegó muy motivado a la fecha pasada con dos victorias al hilo, aunque cayó 3-2 con Defensa en Florencio Varela.

En un campo de juego que se presentaba rápido por la lluvia, la visita inició el partido con una superpoblación de jugadores en la mitad de cancha para romper los posibles ataques de su anfitrión, que no obstante tuvo la primera llegada con el chico Almada, bien resuelta por Navarro. Un rato más tarde, un tiro libre de Belluschi se fue muy arriba. 

Empujado por su público, Vélez insinuaba un poco más. Pero el Ciclón tuvo dos chances en los pies de Botta y de Reniero. Hasta que Belluschi perdió la pelota en una salida y Almada sacudió el poste izquierdo. La primera etapa se extinguió con un remate de Giménez que se fue apenas alto.

En el complemento, el que se afirmó en el mediocampo y salió más decidido a quedarse con los tres puntos fue el local. Almada tuvo otras dos ocasiones claras y Robertone estuvo cerca de anotar con un tiro libre que dio en el palo. En la réplica, un error de De la Fuente no pudo ser aprovechado por Merlini. Almirón apuró los cambios, pero aun así San Lorenzo seguía replegado, le costaba atacar y trataba de frenar los embates del Fortín, que se lo llevaba por delante. Lo tuvo Vargas y en la jugada siguiente Domínguez le ahogó el grito a Reniero. Y pese a asfixiar a su rival, los de Heinze –que claramente merecieron más– no pudieron quebrar el cero. Del otro lado, en el debut de Almirón como DT, el Ciclón rescató un empate en una plaza difícil.