El juicio que se sigue a tres directivos de la automotriz Ford por su vinculación con los crímenes de lesa humanidad que tuvieron lugar dentro de la planta que la compañía instaló en zona Norte del Gran Buenos Aires, contra parte de su planta de trabajadores, en plena dictadura cívico militar ingresó, ayer en etapa de alegatos. Desde la mañana, el Tribunal oral en lo Criminal Federal N°1 de San Martín comenzó a oír las conclusiones que el Ministerio Público fiscal, representado por Angeles Ramos, sacó del debate oral, que se extendió durante casi un año. El proceso evalúa las responsabilidades de Pedro Müller, Héctor Sibilla, ex jefe de Manufactura y ex jefe de Seguridad de la planta de Ford en General Pacheco, y el represor integrante del Ejército Santiago Omar Riveros, en el secuestro y las torturas sufridas por 24 trabajadores de la automotriz. Son los únicos dos civiles de la línea gerencial de la compañía que llegaron a esta etapa del proceso judicial con vida. En tanto, fallecieron 12 de las 24 víctimas.