Estudiantes del Instituto Superior número 24 "Héroes de Malvinas" de Villa Gobernador Gálvez y Amsafé Rosario denunciaron ayer públicamente el incumplimiento de las leyes vigentes del sacerdote Sergio Casas Silva, que da clases de materias nodales como Pedagogía, Filosofía de la educación, Historia Argentina y Política Educativa Argentina de ese centro de formación docente. "Si seguís usando lenguaje inclusivo no aprobás mi materia", fue una de las expresiones del cura que rechaza la educación sexual integral, acusa a sus colegas de "marxistas", define a la homosexualidad como "una enfermedad" y dejó por escrito sus conceptos discriminatorios, contrarios a las leyes vigentes, en una nota presentada el 30 de octubre a la dirección, en la que desnudó todos sus prejuicios. "El Ministerio está informado del caso, lo que hemos pedido es una actuación administrativa, y la separación del cargo, a partir de que este profesor con los contenidos que está enseñando está por fuera de la Constitución Nacional, de la ley de matrimonio igualitario, de la ley de Educación Sexual Integral y de la ley de identidad de género, está afuera de cualquier diseño curricular", denunció Gustavo Terés, secretario general de Amsafé Rosario. Desde Educación, el subsecretario de Asuntos Legales y Despacho Fabián Cassaniti afirmó que iniciarán el "procedimiento sumarial", con el cuestionado docente en su cargo.
Mientras tanto, las comisiones de Cultura y Extensión Estudiantil del Centro de Estudiantes del Instituto elevaron una nota a las autoridades en las que exigen la "inmediata intervención" ante la "intromisión" del profesor. "Denunciamos que, conforme a lo establecido en el Diseño Curricular del Profesorado de Educación Primaria, no se han respetado los contenidos previstos para las diferentes unidades curriculares. Citamos como ejemplo la utilización en el área de pedagogía, de un único material bibliográfico trabajado en pedagogía el año pasado, titulado Pedagogía y Educación del autor Antonio Capponetto. Este material expone una postura nacionalista de derecha, católica, ultraconservadora. En el texto puede leerse que la escuela es un lugar de contemplación y no de transformación, que los docentes deben ser virtuosos y poseer vocación y no considerarse trabajadores de la educación, como sugieren los gremios de 'influencia marxista'. Que la cultura argentina es occidental y cristiana y la democracia es un mal sistema de gobierno. Este material resume la postura del cura, ya que varixs compañerxs han tenido que tolerar comentarios del tipo 'que nuestra ley de educación es nefasta', 'que no le parece conveniente que la escuela enseñe educación sexual', 'que la democracia es un régimen político que no sirve'".
La enumeración de las violaciones a la ley que las estudiantes deben soportar en el aula incluye la cita permanente a santos y papas, y la negativa a trabajar Freire, al que califica como "un pervertido". "El colmo de la expresión ideológico-religiosa de esta persona en las aulas se refirió a la ESI, el debate acerca del aborto y el lenguaje inclusivo, apelando a un discurso biologicista tajante y religioso, que va desde la afirmación de la única existencia de cromosomas xx y xy, a la abierta desacreditación de la ESI como algo relegado al ámbito de lo privado, que atenta contra los valores sociales", sigue describiendo el texto de las alumnas.
La delegada de Amsafé Rosario, Mercedes Castro, subrayó que la bibliografía única en la que basa sus clases Casas Silva proviene de Capponetto, "director de la ultraderechista revista Cabildo. Ese texto reivindica la pedagogía personalizada de García Hoz, el franquista, que tomaron Onganía y la última dictadura militar. Las chicas además nos comentaban que habla de curas y de santos".
Por su parte, Cassaniti afirmó que las autoridades recibieron "información o denuncias tanto de estudiantes como de docentes del Instituto 24, en el cual sobre temas extremadamente sensibles como el tema del aborto, la discriminación sexual, el feminismo, habría vertido posturas autoritarias". El funcionario ministerial afirmó: "Vamos a iniciar un procedimiento sumarial que es simplemente abrir una etapa de investigación para empezar a colectar las pruebas necesarias para ver si se corroboran estas sospechas para ver si cometió alguna irregularidad, si infrigió alguna norma como la ley de educación, de Educación Sexual Integral, de protección de los derechos de niños".
Casas Silva va a dar clases con su sotana, y hace alarde -según denuncian las estudiantes- de sus posiciones contrarias a las leyes. "Manifestamos que esta persona se encuentra incumpliendo las obligaciones que la ley nº26.206 expone: 'Los/as docentes de todo el sistema educativo tendrán la obligación de cumplir con los lineamientos de la política educativa de la Nación y de la respectiva jurisdicción y con los diseños curriculares de cada uno de los niveles y modalidades' y 'respetar la libertad de conciencia, la dignidad, integridad e intimidad de todos los miembros de la comunidad educativa'", refrescaron las estudiantes por si hacía falta recordarlo.
Para Terés, es imprescindible que el Ministerio decida separar al sacerdote del cargo. "Cualquier destinatario de sus clases sería perjudicado. Ha tenido actitudes homofóbicas, de rechazo al lugar que tiene que ocupar la mujer en la sociedad, él ha reprochado en el aula a muchas chicas que trabajan, en una actitud muy retrógrada, muy oscurantista", arguyó y agregó: "Esto no es una prédica antirreligiosa, somos respetuosos de la libertad de culto, decimos que la educación debe estar en las escuelas y la religión en las iglesias, y respetamos la libertad académica. Pero hay un piso mínimo que es el respeto al ser humano. No se puede decir que la ESI promueve la prostitución o que los cuadernos de educación sexual incitan a la pornografía y la corrupción de menores".