Mauricio Macri salió a poner paños fríos a la decisión de no concurrir el próximo 1º de enero a Brasilia para la asunción de Jair Bolsonaro. El jefe de estado confirmó a través de Twitter que se verá con el mandatario ultraderechista el 16 de enero en la capital brasileña. Planteó ese encuentro como el punto de partida “para empezar a trabajar juntos en esta nueva etapa”.

Bolsonaro fue electo a fines de octubre en el ballotage que le dio el 55 por ciento de los votos ante el candidato del PT, Fernando Haddad. Macri decidió no concurrir a la asunción del nuevo mandatario de Brasil.

Bolsonaro se hará cargo de la presidencia brasileña el primer día del año próximo. Macri ni siquiera delegó la representación en la vicepresidenta Gabriela Michetti, sino que anunció que enviará al canciller Jorge Faurie, quien será el enviado a la toma de posesión del nuevo presidente de Brasil.

En plena polémica por lo que podía interpretarse como un desaire al principal socio argentino en el Mercosur, Macri dio a conocer hoy que tuvo una conversación telefónica con Bolsonaro y se acordó la visita del mandatario para dos después de la jura de su par brasileño.

La relación con el Mercosur parece ser un tema que genera rispideces. Bolsonaro no da señales de ser muy proclive a fortalecer el bloque regional, sino que apunta a tratados de libre comercio, mientras se estancó el acuerdo con la Unión Europea. Además, contra la costumbre de todos sus antecesores, el próximo presidente de Brasil anticipó que no será la Argentina el primer país que visitará.