El nuevo año comenzará con otro duro golpe al bolsillo de los usuarios del Transporte Urbano de Pasajeros (TUP). La secretaria de Movilidad, Mónica Alvarado, confirmó ayer que a partir del 1º de enero el boleto costará 23,17 pesos, tras la aprobación del último estudio de costos que elabora el Ente de la Movilidad (EMR), que arrojó un valor de 25,74 pesos en octubre. La tarifa para uso frecuente de 40 viajes será de 19,96 pesos, y la de 80 viajes costará 18,84 pesos, mientras que el sistema de bicicletas públicas pasará a tener una tarifa de 29,94 pesos por día. Por otra parte, la funcionaria anunció que ya no correrá más el boleto ocasional, que se abonaba con monedas, a partir de la entrada en vigencia del nuevo sistema de colectivos y de la futura implementación de la tarjeta Sube. Tampoco se imprimirán más tickets, en adhesión a la ordenanza aprobada por el Concejo Municipal. Ediles opositores cuestionaron el nuevo aumento y remarcaron que desde enero la tarifa aumentó más del 100 por ciento.

A partir del martes, los usuarios de colectivo tendrán que pagar un boleto de 23,17 pesos. La modificación tarifaria fue confirmada luego que el Ente que preside Carlos Comi y que integran Alvarado y la concejala Renata Ghilotti (Cambiemos) aprobara el estudio de costos de octubre, que arrojó un valor total del boleto por pasajero de 37,51 pesos. Descontados los subsidios y compensaciones, el costo quedó en 25,74 pesos.

A partir de la delegación de facultades que le dio el Concejo a la intendenta Mónica Fein, que puede fijar trimestralmente una tarifa de hasta el 90 por ciento del estudio de costos, Alvarado informó que el boleto costará 23,17 pesos, cerca de cinco pesos más de lo que venían abonando los usuarios del TUP. La progresión de los aumentos desde enero del 2018, cuando costaba 11,49 pesos, fue la siguiente: Marzo (12,93), junio (14,80), septiembre (16,80), octubre (18,28). En total, el boleto acumuló un aumento de 101,65 por ciento.

Entre las novedades, Alvarado anunció que desaparecerá el boleto ocasional porque el nuevo sistema no contará con las monederas. Además, la funcionaria argumentó que la utilización de dicha modalidad de pago no llegaba al 1 por ciento. "Transmitimos tranquilidad a los usuarios, van a estar cubiertos por el seguro y toda la información queda en la tarjeta", agregó la secretaria de Movilidad ya que tampoco se imprimirán tickets.

Luego de los anuncios, el concejal Eduardo Toniolli (PJ), consideró que "cien por ciento de aumento del boleto en un año es una barbaridad". Por otra parte, el edil justicialista denunció que por los aumentos sucesivos "en 2018 se cortó un 20 por ciento menos de boletos que en el 2015", y responsabilizó "a los gobiernos de Macri y Fein, que son socios en esto de recurrir siempre al bolsillo del usuario".

Toniolli remarcó, tomando como referencia un informe del Observatorio del Transporte, que "en diciembre de 2015 un rosarino podía comprar con un salario mínimo 887 boletos de colectivo, hoy sólo 488. Ese número expresa crudamente el peso cada vez mayor que tiene el transporte público en el bolsillo de los trabajadores y de los sectores medios".

"Insistimos en buscar alternativas para financiar el sistema de transporte que sume recursos sin recurrir siempre al bolsillo del usuario, que ya está agotado y provoca que cada día más y más se bajen del colectivo, alimentando este círculo perverso que pone en crisis el sistema", señaló ayer la concejala Fernanda Gigliani (IP). "Seguimos rechazando estos aumentos automáticos y la potestad a la Intendenta para producirlos, acordados por el Frente Progresista y Cambiemos", cuestionó la edila.

Finalmente, el concejal Osvaldo Miatello (Compromiso con Rosario) señaló: "Ayer (por el jueves) Macri aumentó la tarifa del transporte en Buenos Aires. Hoy (por ayer) Fein hace lo mismo en Rosario. Hacen que se pelean, dicen que son distintos, pero hacen lo mismo. Que la inocencia nos valga".