Acabo de leer la nota de Ailín Bullentini que publica hoy Página 12 a propósito de tu reacción frente al uso que otro periodista pretendió hacer de la muerte de Héctor Timerman.

Es cierto que hay jueces y jueces, y fiscales y fiscales, pero no es que unos sean más “humanos” que otros. Lamentablemente hay que reconocer que todos somos parte de la misma humanidad.

Es que aunque haya ellos y nosotros, cuando pensamos en cómo mejorar este mundo, y eso incluye al Poder Judicial, no podemos excluir a nadie.

Para mí el asunto es otro. Hay jueces respetuosos de los derechos que reconoce nuestra constitución y hay otros que deciden utilizar el derecho con otros objetivos, ya sean propios o ajenos.

Hay jueces y fiscales que aplican razonablemente principios básicos como que todos somos inocentes hasta que no se nos condene después de un juicio en el que nos hayamos podido defender.

Que saben que no se puede condenar por “sospechas” de que alguien hizo algo. No debe haber ninguna duda sobre qué se hizo, y cómo se hizo. Es que sin esa certeza, no estamos ante un juicio -tarea del Poder Judicial- sino ante las suposiciones típicas de comentarios malintencionados que, en las peores épocas que hemos vivido sirvieron para la caza de brujas y otras persecuciones. 

Hay jueces y fiscales que tienen claro el valor supremo que se debe acordar a la libertad de las personas y sólo la restringen provisoriamente cuando no hay más remedio, cuando es indispensable. Pero antes de esa decisión saben que deben agotar todas las posibles alternativas.

En fin, hay jueces y fiscales que cumplen bien y orgullosamente su tarea y eso es lo menos que los ciudadanos debemos exigirles.

Hay mucho que cambiar en el Poder Judicial, lamentablemente nada nos asegura que lograremos inspirar a los jueces para que desarrollen empatía, pero lo que sí podremos hacer, y en esto confío, es desarrollar mecanismos de control para exigir el irrenunciable cumplimiento de nuestros derechos constitucionales.

No es sólo tarea de jueces y fiscales. Es nuestra.

 

La respuesta de Graciana Peñafort

Tiempo después de que Página/12 publicara esta nota de opinión, la abogada Graciana Peñafort felicitó a la magistrada María Laura Garrigós de Rébori por los argumentos aquí expuestos. "A veces los grandes de verdad te contestan y vos no podes más que aplaudir y querer darles un abrazo. infinitas gracias", manifestó Peñafort en la red social Twitter. "Abrazo de gol", agregó.