De un tiempo a la fecha, la nostalgia noventera levantó llamativa bandera, aclamando a Fran Fine, personaje estelar interpretado por Fran Drescher en la entrañable sitcom The Nanny (en criollo, La niñera), un ícono fashion, amén de ajustados conjuntitos que han sido reciente inspiración para modistos ABC1. La propia revista Vogue así lo advertía en un artículo donde aseguraba que los looks de la protagonista son tan destacables hoy como lo fueron durante las seis temporadas del programa. “Bien vale preguntarse si Jeremy Scott estaba viendo viejos episodios cuando diseñó su colección Moschino Resort 2017, psicodélicamente glamurosa”, sumaba la publicación, cantando loas a Fran: “cazadora de gangas y lealista de la tienda Loehmann’s, que supo demostrar que podía amasarse un gran estilo con presupuesto limitado”. Fran, fan de Moschino y Todd Oldham, que se calzó también diseños de Anna Sui, Dolce & Gabbana, Versace, Missoni, Fendi, John Galliano, gracias al buen ojo de Brenda Cooper, directora de vestuario de la serie. Pues, no conforme con celebrar las reivindicadas pilchas de la afamada niñera, un curador de arte contemporáneo ha llevado el aplauso aún más lejos…

Para Louis-Philippe Van Eeckhoutte, que vive en Bruselas, las ropitas de Fine no solo son nuevamente trendy, perennes piezas de arte. Así lo patenta el muchacho belga en su flamante y popular cuenta de Instagram, TheNannyArt, donde muestra cómo algunos outfits de la niñera se asemejan muchísimo a reputadas esculturas o pinturas del mundillo del arte. En un posteo, por ejemplo, se ve a Fran vistiendo una minifalda cuyo motivo se asemeja a una pintura de Piet Mondrian; en otro, una de sus blusas recuerda tantísimo a uno de los afamados arlequines de Picasso; y una yuxtaposición más contemporánea compara cierto abrigo de plumas anaranjado de FF con una de las esculturas estilo Muppet de Stefan Tcherepnin. “Estoy mandado a hacer para encontrar conexiones visuales”, dice Louis-Philippe, que dio con el primer parecido cuando una blusa de lunares de Fine le recordó a una pintura de Gerhard Richter de 1988, Betty. “Fran Fine es una metáfora de las artes”, asegura el joven que desde el eureka inicial ha hallado una gran cantidad de artistas en el armario del personaje, combinando sus atuendos con obras de Cindy Sherman, Kelley Walker, Bridget Riley, Andy Warhol, René Magritte, Katherine Bernhardt...

Más en @thenannyart