Luego de que la familia reconociera el cuerpo de Carla Soggiu, la joven desaparecida desde el martes tras activar dos veces el botón antipánico, su padre estimó que se podría haber desorientado y luego ahogado porque “no estaba fuerte” ni bien alimentada, desde que el 26 de diciembre había sido víctima de agresiones físicas y violación por parte de su ex pareja, Sergio Fuentes. Un informe preliminar señaló ayer que el cadáver de la joven de 28 años no tenía signos externos notorios de violencia y que habría muerto por asfixia por inmersión. 

Alfredo Soggiu aseguró que buscará determinar si esa situación ocurrió a raíz de los golpes que había sufrido por parte de su ex pareja, sumado a la "mala alimentación y al estrés". El hombre sostuvo que para él su hija de 28 años caminó cinco cuadras y llegó "a la vera del Riachuelo por algún pasadizo", tras lo cual pudo haber sufrido "un problema con la válvula" de drenaje que tenía colocada en la cabeza por la hidrocefalia que padeció. 

La Policía de la Ciudad revisó las cámaras de seguridad de la zona y determinó que la joven, al salir de su trabajo el martes último, subió a un colectivo de la línea 32, entre las 18 y las 18.30 en avenida Sáenz al 500. Según el padre de Carla, la joven pudo haberse confundido y haber terminado a la vera del Riachuelo, de donde no pudo salir porque había "llovido y estaba fangoso".

El padre descartó cualquier intento de suicidio y relacionó lo sucedido con los episodios de violencia de género que Carla sufrió y por los que la Justicia le había proveído un botón antipánico el 27 de diciembre. "Necesito que un especialista me diga si los golpes que sufrió sumado a la mala alimentación y al stress la llevaron a esta situación", indicó.

Fuentes se encuentra detenido con prisión preventiva en el penal de Marcos Paz por los delitos de "abuso, lesiones, y privación ilegítima de la libertad". En tanto, los familiares de la joven denunciaron que los padres y la hermana mayor del detenido comenzaron a acosarla luego de que la Justicia dictara su encarcelamiento. 

El cuerpo fue encontrado el sábado cerca de las 6.30 por un grupo de trabajadores que realizaba una limpieza en el Riachuelo, por lo que avisaron a la Prefectura Naval Argentina y a la Policía de la ciudad de Buenos Aires. Si bien la identidad del cuerpo no fue confirmado por pericias médicas, los familiares lograron identificar ayer a Carla por un tatuaje, la ropa y un piercing que le fueron mostrados, por fotografías, por el fiscal de la causa, César Troncoso.