Vecinos del barrio de Flores reclaman que el gobierno porteño frene las obras en Plaza Pueyrredon, más conocida como plaza Flores, porque la intervención en el sitio se está haciendo de forma inconsulta, en un Área de Protección Histórica sin que haya tenido parte la Legislatura, como estipula la ley, e incumpliendo las leyes de Patrimonio Cultural y de  Patrimonio Arqueológico. Según el referente de Flores Solidario Marcelo D’Ambrosio, la obra para poner en valor la plaza, que tiene un presupuesto de 13.411.158,62 pesos, es, “primero, innecesaria. Hay otras prioridades en la comuna: el Hospital Álvarez no tiene tomógrafo y falta una escuela secundaria, por dar sólo dos ejemplos. Segundo, es un área protegida en la que están destruyendo patrimonio histórico”. 

El reclamo vecinal motivó un pedido de informes de legisladores de Unidad Ciudadana y un proyecto de declaración para expresar preocupación por la situación. Ambas propuestas fueron rechazadas por el oficialismo, que suele avanzar con obras, como pasó con las rejas de Plaza de Mayo, sin permisos y sin respetar las instancias de participación ciudadana pero con mucha cartelería amarilla. 

“¿Quién sabe mejor lo que un barrio necesita que el propio vecino? Necesitamos que eso lo expresen, que voten y elijan cuál es su prioridad”, había remarcado el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta dos años atrás, al presentar el programa Participación Ciudadana BA Elige.

Sin embargo, los reclamos vecinales se multiplican en los barrios de la ciudad sin reverberar en la administración porteña. “Plaza sí, negociados no”, “10.833.300 mal gastados en baldosas sanas” fueron algunos de los carteles colgados por los vecinos durante una jornada en la que, días atrás, montaron una radio abierta para reclamar contra el avance de la obra en la plaza, ubicada en avenida Rivadavia al 6900. Según explicaron, la zona central del lugar, donde se están realizando los arreglos, no registraba roturas que justifiquen la intervención que, además, “es ilegal”.

El alerta de los vecinos se disparó el 15 de marzo pasado, cuando apareció el vallado alrededor de la plaza y comenzaron los preparativos para las obras licitadas a fines del año pasado (licitación Pública Nº 672/SIGAF/18) por el Ministerio de Ambiente y Espacio Público de la Ciudad.

“Es la segunda vez que intervienen con obras contraviniendo la ley de comunas”, advirtió Cristina Sottile, coordinadora de la comisión de Cultura y Patrimonio del Consejo Consultivo de la Comuna. “Por el tamaño de la plaza es una cuestión de competencia exclusiva de la Comuna (la N°7) y se tendría que haber discutido en el Consejo. Pero el Ejecutivo Municipal programa obras no informadas a los vecinos y no presentadas al Consejo”, advirtió. 

Sin embargo, remarcó que lo más grave es que “se contraviene un área protegida. La plaza esta dentro del Area de Protección Histórica (APH) 15 (Ley 2500/2007) que implica que debería haber tenido tratamiento en la Legislatura. Además, es un sitio arqueológico, que no está relevado completamente y todavía puede aportar muchos datos sobre el desarrollo histórico de la ciudad. Y está protegido por la ley nacional de Patrimonio Arqueológico (Ley N° 25.743) y por la ley de Patrimonio Cultural (N° 1227)”.

Sottile, que además de coordinadora en la Comisión es antropóloga, remarcó que “ninguna de estas disposiciones se cumplieron. Y explicó que “cuando se interviene en sitios como este debería estar presente un arqueólogo. La ciudad tiene equipo de arqueólogos calificado para cumplir esta tarea pero no les dan intervención”.

Según detalló la integrante de la Comisión de Cultura y Patrimonio, el  Consejo Consultivo se entero del proyecto de puesta en valor de la plaza  porque la Dirección General de Interpretación Urbanística (Dgiur) les envió una nota diciendo que “la plaza había que arreglarla porque estaba mal mantenida”.

En este sentido, hay que recordar que la comuna 7 está bajo el control de Cambiemos desde 2012. Ese año, el presidente de la Junta Comunal, Guillermo Peña, quien sigue al frente de la comuna, y varios funcionarios fueron denunciados por intervenir la plaza Pueyrredón sin cumplir con las leyes, las mismas que ahora volvieron a eludir.

Por otra parte, la semana pasada, al plenario del Consejo Consultivo le informaron que se iba a sacar el árbol central de la plaza porque tenía un problema. Sin embargo, según contó Sottile, “sacaron otro ejemplar que estaba sano”. 

“No solo violan las leyes e ignoran todos los mecanismos de la democracia sino que nos toman por tontos. Hacen declaraciones públicas, se dan por satisfechos y siguen extrayendo árboles. Y la nuestra es una gran capital y una de las que menos espacios verdes tiene por habitante, la Organización Mundial de la Salud recomienda 16 metros cuadrados por habitante y tenemos menos de 6”.

Mientras tanto, los vecinos del barrio siguen en estado de alerta, reclamando el cese de las obras y preparando futuras acciones en la plaza para que “no se siga destruyendo el patrimonio de la ciudad, como pasó con la casa de Alfonsina Storni, la de Evaristo Carriego, y tantos lugares más que fueron demolidos”.