A la calamidad de haber sida entregada para casarse a los 13 años con un adulto, una mujer afgana de 23, Zarina, fue mutilada salvajemente por ese hombre una madrugada mientras dormía. El violento volvió a las 3 AM, la ató a una silla y le cortó las dos orejas “por mirar a otros hombres”, y Zarina recién pudo recibir atención médica al día siguiente, y gracias a sus familiares. La ley afgana prohíbe el casamiento de las mujeres antes de los 16 años, pero la Comisión Independiente de Derechos Humanos de Afganistán (AIHRC) registró 235 casamientos precoces en 2015.