Los empleadores argentinos, encabezados por Daniel Funes de Rioja (foto), se abstuvieron en la votación del Convenio 190 contra la Violencia de Género y Acoso Laboral que se aprobó en el cierre de la conferencia anual de la Organización Internacional del Trabajo en Ginebra. La CGT rechazó esa abstención, que “deja en evidencia su falta de sensibilidad y compromiso con los sectores más vulnerables y su desinterés en la defensa de los derechos laborales y humanos más elementales de los trabajadores”. La central obrera expresó que esa posición hace “retroceder a la Argentina a nivel internacional en términos de equidad y garantía de derechos”. Con la firma de los secretarios generales Héctor Daer y Carlos Acuña y los secretarios de Relaciones Internacionales y Prensa, Gerardo Martínez y Jorge Sola, respectivamente, los gremialistas recordaron que “la temática de la violencia y el acoso laboral fue uno de los ejes centrales que rigieron la cumbre de la OIT” y que el convenio se aprobó “con la mayoritaria adhesión y aprobación de la Asamblea”.