El gobierno de la provincia de Mendoza dispuso el “traslado preventivo” de una vicedirectora por usar el lenguaje inclusivo. La Dirección General de Escuelas (DGE) tomó la decisión, luego de que un grupo de padres y madres de la escuela primaria Manuel Blanco Encalada, del departamento de Junín, en el este provincial, se quejaran porque la docente, Carolina Gutiérrez, usaba la frase “todos, todas y todes”, en los saludos al alumnado.

El anuncio lo hicieron autoridades de la DGE en el propio colegio. Informaron, además, que será sometida a una investigación administrativa por su accionar. El secretario general de SUTE, principal gremio docente, Sebastián Henríquez, adelantó a Página/12 que exigirán a la DGE que dé marcha atrás. “Nos oponemos. Acá el traslado preventivo es claramente disciplinador”, objetó Henríquez. Consultada por este diario, la decana de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, Graciela Morgade, expresó su preocupación por la sanción y la consideró “inaceptable”.

La decisión del “traslado preventivo” de Gutiérrez se tomó ayer en una reunión de la que participaron el director de Educación Primaria de la provincia, Sergio Márquez, Hugo Martín, delegado regional de la DGE en la zona Este, y padres y madres, en la misma escuela. Martín, en declaraciones a Radio Nihuil, de Mendoza, reconoció que recibieron quejas la semana pasada. “Los padres nos plantearon su disconformidad porque la vicedirectora utilizaba el lenguaje inclusivo. En realidad lo que nos planteaban es que esta utilización, más allá de que puede generar voces a favor o en contra, no había sido algo consensuado con la comunidad, con los padres o con el personal de la escuela”, contó el funcionario.

También dijo que le habían expresado su disconformidad por “una serie de irregularidades que sucedían en la escuela” y en ese sentido, señaló que “algunos padres nos plantearon que había algún tipo de proselitismo en la escuela, que había algún tipo de adoctrinamiento, algunas cosas que tienen que ver con el accionar de la escuela de mayor apertura”, pero no aclaró más a que se referían.

El traslado preventivo, dijo, se realiza porque “había un quiebre institucional” entre la comunidad educativa y Gutiérrez, y se efectiviza mientras se desarrolla una investigación administrativa, que será elevada a la Junta de Disciplina.

Francisco Fernández, director de Asuntos Jurídicos de la DGE, sumó otro elemento a la polémica decisión. Al ser entrevistado por la radio LW10 dijo: “Lo que sucede en realidad, es que los padres, esa manifestación del lenguaje inclusivo lo perciben como un hecho político”. Y agregó en relación a la vicedirectora: “es una militante del partido justicialista”.

La vicedirectora Gutiérrez, en diálogo con el diario Los Andes, respondió: “Lo increíble es que no es una barrera pedagógica sino social que es algo que se puede cambiar. Estamos hablando del discurso de una construcción colectiva que va cambiando con las realidades sociales, nadie por el uso del lenguaje cambia su identidad sexual”. Página/12 se comunicó con la docente, pero Gutiérrez aclaró que por el momento prefería no volver a referirse al tema. El viernes fue el último día que fue a la escuela.

“Tengo una mezcla de sensaciones. Por un lado estoy contenta, porque se ha instalado el tema. Por otro estoy preocupada, porque sigue habiendo rechazo a estas cosas, entre ellas el lenguaje inclusivo, sin entender qué significa”, dijo al Diario Uno algunos días atrás. Tiene 46 años y la mitad de ellos los ha dedicado a la docencia. Tiene 3 hijos y un nieto. Hizo una licenciatura en Gestión Institucional y Curricular, en la Facultad de Educación y luego se inscribió en una maestría en Integración Educativa y Social. En su tesis, contó, aborda la integración de alumnos homosexuales en el ámbito educativo. “Conozco personas que han sufrido situaciones muy tristes, que han tenido que esconder su identidad sexual, que han sido muy golpeadas, muy lastimadas. Por eso entendí que es momento de ver esas cosas y trabajar para la igualdad y la inclusión”, declaró.

Junín es un departamento gobernado por el radicalismo: su intendente, Mario Abed es el candidato a vicegobernador en la fórmula del oficialismo que encabeza el cornejista Rodolfo Suárez. Desde el SUTE perciben que el episodio no puede disociarse de ese contexto político y el hecho de que Gutiérrez es militante kirchnerista.

Desde que el tema trascendió en medio locales, unas semanas atrás, hubo carteles de apoyo a la docente y banderas LGBTTI pegadas en el frente a la escuela.

“Hay que señalar que hablar con un lenguaje inclusivo es hacer política y se vuelve a pensar que lo político es negativo. Los vínculos humanos y las escuelas en particular son espacios en los que la política está presente permanente porque hay debates, visiones diferentes, y toda educación es política. Ahí hay un retroceso en términos de la visión de la educación que es muy preocupante. La otra dimensión preocupante. En una escuela, que es un espacio en el que se construye conocimiento, y se alojan diferentes visiones, la comunidad educativa, los padres, las madres, que plantean una objeción, tengan una respuesta del sistema educativo de ese tenor”, dijo en diálogo con Página 12 la decana de Filosofía y Letras, Graciela Morgade, referente en Educación Sexual Integral.

--¿Cómo se debería haber manejado el conflicto frente a la queja de padre y madres? –le preguntó este diario

 

--A los padres y madre se les puede explicar que en un proceso de construcción de conocimiento, el lenguaje, que es una producción social viva, está buscando la mejor manera de representar al conjunto y que si una vicedirectora dice “todos, todas y todes”, está intentando de que la educación es el espacio de la universalización, en donde todos los sujetos tienen derecho a tener una voz y existir. Esa directora está haciéndose cargo de hacer una búsqueda, que sabemos que no está aprobada por la Real Academia Española pero también sabemos que la RAE aprueba el uso de términos después de que se usan las palabras. Esa docente está haciendo una búsqueda y el sistema educativo en lugar de apoyar a esa profesional de la educación la separa de la escuela. Es inaceptable desde el punto de vista de las garantizas que tiene que dar le Estado.