A dos años de su emisión original y la polémica que originó, Netflix decidió borrar la controversial escena del suicidio en 13 Reasons Why. Desde su lanzamiento en marzo de 2017, la serie disparó un debate sobre si lidia con tacto con el delicado tema del suicidio adolescente, y fue fuertemente criticada por varias organizaciones de salud mental.

En su momento se informó que varias escuelas enviaron cartas a los padres de alumnos advirtiéndoles sobre la serie, lo que llevó a que los productores defendieram públicamente su decisión de incluir la cuestionada escena.

Ahora, y a las puertas del estreno de la tercera temporada, Netflix anunció que decidió “tomar en cuenta el consejo de expertos médicos” y revisará el episodio final de la primera temporada, en el que se presentaba la escena de tres minutos de duración.

“Muchos jóvenes nos han dicho que 13 Reasons Why los alentó a iniciar conversaciones sobre cuestiones tan difíciles como la depresión y el suicidio y que se animaron a buscar ayuda, a menudo por primera vez”, señaló un comunicado de la plataforma de streaming.

“Mientras nos preparamos para el lanzamiento de la tercera temporada, el próximo verano (boreal), hemos estado muy atentos al debate que permanece sobre el show. Por lo que, siguiendo el consejo de expertos médicos que incluyen a la Dra. Christine Moutier –Jefa Médica de la Fundación Americana para la Prevención del Suicidio-, hemos decidido junto al creador Brian Yorkey editar la escena en la que Hannah se quita la vida”. La escena ya no aparece en Netflix.

13 Reasons Why gira alrededor de Hannah Baker, una estudiante de 17 años que se suicida y deja 13 casetes dirigidos a trece personas diferentes que siente que tuvieron una influencia en su decisión.

El año pasado, en diálogo con este diario , Katherine Langford, actriz australiana que encarnó a Baker, se refirió a la polémica escena: "Fue difícil, un desafío enorme. Pero también algo bueno en términos de crecimiento, y algo en el que hubo mucho cuidado. En términos creativos, estábamos muy al tanto de lo que estábamos haciendo y cómo queríamos hacerlo, con respeto y sensibilidad. Pude trabajar con psicólogos, profesionales, para asegurarnos de que yo entendiera lo que estaba haciendo, el punto de vista de lo que Hannah atravesaba."