Darío Benedetto no será parte de la delegación de Boca que el próximo martes viaje a Brasil para enfrentar a Athletico Paranaense (miércoles, a las 21.30) por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. El delantero, en tratativas para ser transferido a Olympique de Marsella de Francia, sufrió una molestia en el gemelo derecho en un amistoso disputado en la semana ante Atlético Tucumán (4-0) que hasta lo pone en duda para la revancha, el miércoles 31 en la Bombonera.

De todos modos, si en los próximos días se firman los avales para la venta del atacante al conjunto olímpico por 16 millones de euros, Benedetto viajará de inmediato a Miami, Estados Unidos, donde el plantel que conduce el portugués André Vilas Boas está haciendo la pretemporada, por lo que se despedirá del equipo de Gustavo Alfaro sin jugar.

Además, los partidos ante Paranaense serían también los últimos del uruguayo Nahitán Nández, quien tendría acordada su incorporación a Cagliari, de Italia, por 22 millones de dólares. El oriental llegó a Boca en 2017 desde Peñarol y disputó 65 partidos, marcando cinco goles.

Mientras tanto, el italiano Daniele De Rossi arribará este lunes al país para sumarse a Boca. El internacional de 35 años firmaría por una temporada y en su contrato habría una cláusula especial que le permitirá marchase en enero próximo si es que decide volver a Italia, donde tendría un ofrecimiento de Roberto Mancini para sumarse al cuerpo técnico de la la selección.

Ilusionados con la llegada de De Rossi, hinchas pusieron el fin de semana un pasacalle frente a Casa Amarilla que decía: "Benvenutti nella republica popolare della Boca. Meta +1 ti aspetva. Questa e Boca" (Bienvenido a la República popular de La Boca. La mitad +1 te está esperando. Esto es Boca).