"Estamos enfrentando situaciones de acción terroristas" dijo el ministro del Interior de Chile, Andrés Chadwick, quien pidió al Senado que apruebe la Ley Antiterrorista que se vota en dos semanas. Sus declaraciones llegan luego de que un paquete explosivo detonara ayer en una comisaría en la zona norte de Santiago, dejando un saldo de ocho carabineros heridos. El hecho aún no fue reivindicado por ningún grupo.

“La ley permitirá que las policías y los fiscales puedan tener los instrumentos de investigación especial, como agentes encubiertos, interferencia de comunicación y entregas vigiladas”, comentó. Esas medidas, que actualmente existen para la Ley Antidrogas, se incluirían a la Ley Antiterrorista existente de aprobarse la modificación enviada por el ejecutivo al Senado.

Chadwick urgió a los legisladores que modifiquen la norma a través de un llamado a la unidad y recalcando la importancia de enfrentar al terrorismo como una visión de país, según informó al periódico El Mercurio. "Estamos ocupados como Gobierno de estar respaldando permanentemente la acción de nuestras policías para que la fiscalía pueda contar con todos los elementos para poder terminar con esta impunidad", dijo.

Ayer ocho carabineros resultaron heridos tras la explosión de un paquete bomba en una comisaría situada al norte de Santiago de Chile. El presidente Sebastián Piñera informó que fue un acto terrorista, aunque aún ningún grupo se adjudicó el hecho.

Según las primeras investigaciones, una mujer dejó un paquete con el explosivo en la guardia de la Comisaría 54ª de Huechuraba. Piñera anticipó que ya se sabe el nombre del presunto remitente y se solidarizó con la institución y las víctimas del atentado.

“Lo ocurrido sin dudas es un acto terrorista” dijo, luego de visitar a los heridos en el hospital de Carabineros acompañado por el Ministro del Interior, Chadwick. "Enviar un paquete con una bomba a una comisaría de Carabineros, sin duda, lo que pretende es causar terror y por lo tanto el Ministerio del Interior se ha querellado invocando la ley antiterrorista", precisó.

Con un fuerte golpe en la cabeza producido por la explosión, fue herido el comisario de la unidad policial, el mayor Manuel Guzmán. Su condición es grave. Otros cuatro heridos fueron identificados: la sargento primera Erika Bravo, los cabos segundos José González Parra y Estefanía Contreras, y el cabo primero José Aguayo. Posteriormente, Carabineros reportó otros tres que no fueron identificados.

"Afortunadamente todos están fuera de riesgo vital", aseveró el mandatario y advirtió que hubo otro paquete. La segunda bomba estaba dirigida a la oficina del ex ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, pero no llegó a explotar. Ambos paquetes tenían el mismo remitente y fueron enviados a través de la empresa Correos de Chile. La mujer que sale en la grabación de las cámaras de seguridad de la comisaría es una funcionaria de Correos que no estaría vinculada al hecho, precisó el presidente. Según la Fiscalía, los dos artefactos tenían la misma confección.

La intendenta de la región metropolitana de Santiago, Karla Rubilar, afirmó a los periodistas que se trató de un hecho "de la mayor gravedad", y confirmó que los cinco uniformados afectados se encontraban "fuera de riesgo vital". Todos los heridos fueron trasladados en helicópteros de Carabineros al hospital de la fuerza para ser atendidos, mientras peritos del Grupo de Operaciones Especiales (GOPE) recogían evidencias en el sitio del suceso.

El hecho hizo recordar atentados similares ocurridos durante el último tiempo en Chile, como el que afectó en mayo al Presidente del Directorio del Subte, Louis de Grange, o el que cuatro meses antes detonó en una parada de colectivos. En ninguno de estos casos se encontraron a los responsables.