El ex guerrillero colombiano Pedro Montoya, alias Rojas, que mató a un comandante de las FARC para cobrar una recompensa, fue asesinado por desconocidos en una zona rural del departamento de Caldas. El hecho ocurrió el sábado por la tarde en el municipio Manzanares, donde Montoya trabajaba en un emprendimiento de piscicultura.

“Tenemos la información de algunos testigos de que dos personas encapuchadas salieron de los matorrales y lo atacaron por la espalda”, dijo el comandante de la Policía de Caldas, coronel Alberto Gómez. Montoya se encontraba en libertad, tras pasar varios años en prisión por un ataque de las FARC al pueblo de Nariño, que causó 16 muertes.

El ex guerrillero se entregó al Ejército en 2008, luego de asesinar a Manuel Muñoz, alias Iván Ríos, por entonces jefe del Bloque Central de las FARC. Tras el crimen, Montoya le cortó la mano derecha y se apoderó de la computadora y los documentos de identidad de la víctima, con el propósito de cobrar la recompensa que ofrecía el gobierno de Colombia, de más de un millón y medio de dólares, cifra que nunca recibió.