A pesar de las dificultades económicas que son moneda corriente en la mayoría de los países del mundo, el cine es el lugar por excelencia para salir de la rutina. Según un informe on line de la cadena Cinemark-Hoyts-del que participaron 7513 usuarios-, el 83 por ciento de los encuestados elige ir al cine cuando tiene tiempo de disfrutar de unas horas de entretenimiento. En ese sentido, el 54, 2 por ciento confirmó que lo hace para entretenerse, mientras que un 21,2 por ciento elige al cine para pasar un tiempo con su familia. A su vez, la mayoría de los espectadores decide ir en familia o con sus hijos (60 por ciento) y la segunda opción es ir en pareja (46,3 por ciento).

Ya sea en soledad o con acompañantes, el que va al cine sabe que esa salida es confortable. De hecho, la psicología desarrolló una rama de estudio denominada "filmoterapia". A través de esta herramienta terapéutica, durante cualquier tipo de proyección, se pueden llegar a encontrar estados inconscientes de reflexión. "Una historia de ficción lleva a cuestionar las propias convicciones porque las películas tratan temas universales y disyuntivas morales como el suicidio, el aborto, la venganza o el perdón", explica el psicólogo Ariel Ghirelli. Este profesional también destaca lo que sucede cuando el público está frente a la gran pantalla: "Esta actividad produce una estimulación especial porque incrementa la dopamina en el sistema de recompensa de nuestro cerebro. La dopamina es el neurotransmisor que nos otorga la sensación de felicidad, plenitud y regocijo. Y mientras más dopamina se libere dentro de nuestro cerebro, más felices seremos". Esta es una de las explicaciones de porqué la gente sigue yendo a disfrutar del cine en la era de las plataformas digitales.

Otro dato que se desprende de la encuesta tiene que ver con que la visita al cine es motivada por el estreno de una película esperada (46,6 por ciento). Además, con mayor o menor frecuencia, la gente encuentra tiempo para poder ir a una sala. De los encuestados, el 37,7 por ciento va al cine seis veces por año, mientras que el 35,6 va más de una. Ir al cine es la ocasión ideal para desconectarse, ya que el espectador elige silenciar e ignorar el celular, como indicó el 71,4 por ciento de los entrevistados, mientras que un 22,8 directamente decide apagar sus teléfonos móviles. Por otro lado, un 58,3 por ciento de los espectadores señaló que busca información en internet o redes sociales antes de elegir qué película ver.

Según lo estudiado por el estudio de Cinemark-Hoyts, en los últimos 12 meses, la mayor parte del público eligió films de animación (Toy Story 4 inclinó la balanza). En segundo lugar, optaron por películas de acción y ciencia ficción. Y también fueron convocantes las de aventuras y terror.