El miércoles pasado, mientras los docentes de Chubut era desalojados violentamente por una patota del sindicato petrolero que conduce Jorge “Loma” Ávila, un maestra grabó con su teléfono celular la reacción de los policías cuando fue a pedir ayuda.

Los dos efectivos presentes en la comisaría local ignoraron por completo a la docente que denuncia la agresión y no hicieron nada al respecto. “Vengo a buscar ayuda de la policía porque nos están reprimiendo los del sindicato de petroleros. Es zona liberada. No puedo entender que estén tan tranquilos cuando somos un montón de mujeres”, pidió la maestra.

Uno de los policías continuó haciendo lo suyo en el mostrador y el otro entró en una oficina. La maestra continuó relatando las agresiones sufridas en la rotonda que une las rutas 26 y 3 en el acceso sur a la ciudad de Comodoro Rivadavia, donde se llevaba a cabo el reclamo docente.

“No lo puedo entender, qué vergüenza, por favor, cómo pueden estar tan tranquilos”, dijo la mujer al borde del llanto. La falta de acción policial reafirma la denuncia de los docentes que sostienen que la zona fue liberada deliberadamente por la Policía para permitir los amedrentamientos.