El sector inmobiliario atraviesa horas decisivas. Fue uno de los grandes perdedores de las restricciones cambiarias, por tratarse de un mercado dolarizado en el que se necesita mucho más que 10 mil dólares para poder operar. Tras reunirse con el Gobierno, todos los actores del sector inmobiliario se juntarán durante el fin de semana para delinear cuál será la propuesta que le presentarán al Banco Central. Y esperan contar con el visto bueno para mediados de la semana que viene. Sin embargo, reina el pesimismo entre los actores del Real Estate. Armando Pepe, presidente del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad, aseguró que “si el sector venía en caída libre, esta es la puñalada final”. Analistas del mercado inmobiliario consultados por Página/12 coincidieron con esta mirada: cualquier excepción con la que puedan avanzar para saltar el cepo no logrará revertir los números en rojo de las operaciones, que acumulan 14 meses consecutivos de caída interanual.

Pablo Lara, director de la consultora Estrateco, especializada en construcción y Real Estate, explicó qué más allá de cualquier medida que apruebe el Gobierno, no van a poder evitar un desplome en el nivel de actividad del mercado. “Si toman alguna medida de emergencia servirá para terminar con operaciones que estaban en curso y se vieron frenadas, pero no se puede esperar ningún efecto contundente”, explicó el economista. Y adelantó: “Las pocas operaciones que se hagan van a sufrir en términos de precios, porque los que quedan en el mercado son los que están forzados a vender, y el que compra va a buscar oportunidades”.

Para Lara, la paralización de la actividad se debe a tres cuestiones: por un lado, la alta incertidumbre en un contexto pre electoral. Por el otro, a las restricciones cambiarias. “Siempre dificultan el mercado inmobiliario, y la prueba más contundente fue lo ocurrido con el cepo anterior, entre 2012 y 2015”, opinó. Y por último, a la caída que arrastra desde abril del año pasado, cuando comenzó la megadevación. “Con el salto cambiario aumentó la inflación y el desempleo y cayó el poder adquisitivo. Con este dólar y este nivel de tasa, ¿quién va a poder pedir un préstamo para comprar una vivienda?”, se preguntó el economista.

Silvio Guaita, economista y asesor inmobiliario, coincidió con que las restricciones afectarán negativamente al sector por tratarse de un mercado dolarizado. Y más allá de las medidas que pueda aceptar el Gobierno, considera que no llevarán a un aumento de las operaciones. “Están presentando alternativas que tienen que ver con la oferta, como el uso de un boleto electrónico. Eso te hace que el trámite sea menos burocrático. Pero lo que hay que hacer es impulsar la demanda”, explicó el analista de la firma DeInmobiliarios. “Para aumentar la demanda necesitás créditos hipotecarios con un mercado cambiario estable. Y que vuelva a crecer la economía para que la gente pueda reinvertir el excedente”, agregó.

Tras el anuncio del control de cambios durante el domingo pasado, los actores del mercado inmobiliario prendieron todas las alarmas. El jueves pasado fueron recibidos por el presidente del Banco Central, Guido Sandleris. Quedaron en presentarle el lunes un documento con propuestas para reducir el tiempo que le puede llevar a la autoridad monetaria liberar el acceso a los dólares para la compraventa de propiedades. Y esperan contar con la aprobación de las medidas a partir del miércoles.

Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria, dijo a este diario que propondrán que se tomen en cuenta "boletas digitales inmobiliarias registrables” como documentación válida para dar vía libre a la venta de dólares. Y que este boleto electrónico se pueda utilizar no sólo para unidades nuevas sino también usadas, dado que representan el 70 por ciento de las operaciones. “Queremos que el mercado no se frene más de lo que ya está”, opinó, y dijo que para que no continúe la caída, debe darse una estabilidad en el tipo de cambio, un control en la inflación y una reactivación en el crédito a futuro. Por su parte, Armando Pepe, del Colegio Profesional de Inmobiliarios, dijo en declaraciones radiales que “si el sector venía en caída libre, esta es la puñalada final”. E incluso dijo que un mecanismo que podría instrumentarse podría ser el Cedín, ideado por Guillermo Moreno, y criticado por las inmobiliarias durante el cepo de Cristina Kirchner.

Una mirada un poco más optimista fue la que aportó Federico Rouco, economista y asesor de la Jefatura de Gabinete de la Nación. “Si se generan mecanismos para la aprobación de la compra de dólares, las restricciones van a ser administrativas, habrá trabas y se demorará más tiempo. Pero no va a ser imposible la compra de dólares”, aseguró. “El espíritu de la medida no fue frenar el mercado”, enfatizó. Además, explicó que la actividad lleva varios meses de caída por la desaceleración de la demanda, ante la dificultad de acceder a los créditos. “El mercado de vuelta se mueve con la gente que compra al contado. Estamos en los mismos niveles de crédito de 2011 y 2013, años muy malos”, concluyó.