Desde Foshan

Con la holgada victoria por 87-67 sobre Venezuela en esta ciudad, la Selección Argentina de básquetbol aseguró su pasaje a los cuartos de final del Mundial que se está disputando en China. Con un partido de la segunda fase todavía por jugar, el equipo de Sergio Hernández ya se encuentra entre los ocho mejores equipos del certamen.  Este domingo, después de jugar contra Polonia -también clasificado junto a España y la favorita Serbia-, los argentinos sabrán en qué sede y contra que rival jugarán por un lugar en las semifinales.

Lo que en un principio se presentaba como un trámite parejo, terminó convirtiéndose en una victoria contundente, con una diferencia de 20 puntos, que se fue concretando en cada uno de los parciales (17-12, 21-13, 25-22 y 24-20). Pero lo más destacable de la Argentina fue que mostró todo su poderío en defensa, cortando los circuitos de juego de Venezuela. Los cambios de marcas al creador de juego de la Vinotinto, Heisser Guillent, fueron fundamentales para anular a los dirigidos por el argentino Fernando Duró.

Unos de los que le hizo sentir la defensa a Guillent, fue Luca Vildoza. "La clave estuvo en imponer el ritmo, ya que sabíamos que ellos no lo podían aguantar”, comentó el base del Baskonia. Luego expresó su deseo de que "se corte la mala suerte y empiecen a entrar" sus tiros. De hecho, este viernes se descargó con que sirvió para retomar el control del partido.

Vildoza también se refirió a Polonia, el próximo rival de la Selección. "Es un equipo muy duro, que está siendo la revelación del torneo", comentó. Sin embargo, el base se ilusiona con seguir avanzando en el certamen y lograr el pasaje a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. "Estamos a un paso de que Luis Scola juegue con nosotros los Juegos Olímpicos… Se lo queremos regalar”, apuntó.

Frente a los venezolanos, volvió a destacarse el santiagueño Gabriel Deck, que fue la máxima figura del partido con 25 puntos y 5 rebotes. "Estuvimos concentrados los 40 minutos", remarcó el alero del Real Madrid. También se refirió a la levantada de Venezuela, liderada por Michael Carrera con 19 puntos -15 de ellos en el tercer cuarto-. "La clave fue volver rápido a nuestro juego", comentó y luego destacó "la mentalidad del equipo".  Al igual que Vildoza, Deck sueña con "regalarle un juego olímpico a Scola". 

En un momento del primer cuarto Facundo Campazzo (12 tantos) enmudeció a los argentinos presentes en el estadio Foshan International Sports & Cultural Arena. Tirado a un costado de la cancha, se tomó el mismo tobillo que se había lesionado hace dos semanas en el amistoso con Rusia aquí en China. Mostraba signos de mucho dolor. Después de varios minutos en el banco, donde fue asistido y vendado por el cuerpo médico, el ex Peñarol volvió a la cancha. “Se me dobló un poco el tobillo, sentí algo raro pero fue un susto”, aclaró tras el partido.

Campazzo nuevamente fue quien manejó los tiempos del equipo y del partido. Con las 9 asistencias en la noche de China, el base de la casa blanca, se colocó entre los 3 mejores asistidores del torneo con 30 asistencias, promediando 7,5 por partido en 4 disputados. Pero fiel a su estilo, el base explicó: "Hubo varios jugadores con más de 10 puntos y eso habla muy bien de la generosidad del equipo". Por último, felicitó a Deck por su actuación destacada: "necesitaba un partido así, tuvo puntos, rebotes y contagió al equipo".