La comunidad del Polo Educativo Mugica, en la Villa 31, convocó para este martes a las 8 a una radio abierta y una clase pública como actividades previas al encuentro que mantendrán con autoridades del Ministerio de Educación porteño, a las que le reclamarán "condiciones dignas y de seguridad para enseñar y aprender". A las 11, se reunirán con los funcionarios que llegarán hasta el complejo escolar que desde su inauguración en marzo pasado sufrió filtraciones de agua, caídas de cielo rasos , incendios , y el alambrado de la calle que impide la llegada de servicios de emergencia hasta la escuela y obliga a los micros escolares a dejar a los chicos a ciento cincuenta metros de la entrada. La semana pasada, ante este combo de precariedad, los docentes del secundario decidieron no utilizar las aulas hasta que representantes del ministerio que comanda Soledad Acuña se hicieran presentes en el lugar.

"El viernes nos informaron que autoridades del Ministerio ofrecieron una reunión para este martes, con funcionarios y representantes del sector de infraestructura,  para dialogar con la comunidad. Docentes, familias y alumnos veremos qué nos proponen y después resolveremos en asamblea", contó a Página/12 Walter Larrea, docente y delegado de la Unión de Trabajadores de la Educación (UTE) dentro del Polo Educativo.

Si bien tienen claro que los variados problemas que afectan al complejo educativo no se resolverán de un día para el otro, esperan que se pueda armar un plan concreto, con seguimiento y plazos, de la mano de arquitectos y técnicos, que garanticen condiciones de seguridad que permitan el dictado de clases sin riesgo para alumnos y docentes. Un reclamo que venían realizando desde hace meses por distintas vías, sin obtener ninguna respuesta.

El conjunto edilicio alberga el jardín de infantes Banderita, al que concurren alrededor de 400 chicos; la escuela primaria Nº 25 Bandera Argentina, con 600 alumnos, y la escuela de educación Media N° 6 Padre Mugica, que tiene 500 estudiantes.

"Tuvimos filtraciones de agua en las aulas por lluvia, caídas de cielo rasos, incendio de un aula y un baño, hornallas de la cocina sin válvulas de seguridad y el alambrado de la calle Letonia para que la utilicen como estacionamiento los funcionarios de tribunales de Comodoro Py, que impide que lleguen ambulancias, bomberos y micros escolares. Y que obliga a los chicos de jardín a caminar, cuando llueve, ciento cincuenta metros bajo la lluvia", detalló Larrea.

El docente explicó que "lo que decidimos en asamblea docente fue que no íbamos a utilizar las aulas del primer piso ni del segundo hasta que no se hiciera un relevamiento de los problemas. No se suspendieron las clases, pero al dictarlas en la planta baja, donde está el comedor, la Dirección, la Secretaría y la biblioteca, hubo que cambiar la dinámica".

En un área que no está preparada para dar clases, los docentes improvisaron tareas didácticas, pasaron películas vinculadas a la situación escolar y hablaron de los derechos de los niños, niñas y adolescentes. Contaron con el apoyo del Centro de Estudiantes.

"En la escuela Media 6, se nos había incendiado un aula del segundo piso y un baño ubicado encima, en el tercer piso, que quedaron clausurados", dijo el docente, recordando el  incidente ocurrido ocho días atrás, el lunes 7 por la tarde, mientras los alumnos de 4to y 5to años estaban en clase de educación física.

Antes, en julio, en la primaria Banderas se había caído parte del cielo raso del primer piso, "justo el último día antes de las vacaciones de invierno. Los chicos, por suerte, no estaban. Estábamos en la calle manifestando por la concesión de alimentos, por la baja calidad y la poca cantidad", contó Larrea.

El delegado de UTE explicó, además, que cada vez que llueve hay filtraciones de agua que anegan las aulas. La lluvia de este viernes y sábado no fue la excepción. "Es un problema grave porque la construcción es nueva. La secundaria se inauguró en marzo y la primaria y el jardín en junio. Es construcción en seco, de durlock, y si no se arreglan en poco tiempo va a estar todo podrido", advirtió.

Y remarcó que "todavía no tenemos el final de obra. Hay terminaciones que faltan, además de todos los arreglos que hay que hacer. Vamos a reclamar por todos los problemas edilicios y que retiren el enrejado de la playa de estacionamiento".