El Gobierno postergó la licitación para avanzar con la construcción de la línea Extra Alta Tensión entre las estaciones transformadoras de Río Diamante (Mendoza) y Charlone (noroeste de Buenos Aires). La convocatoria se había realizado en marzo e iba a ser el primer proyecto financiado con el régimen de Participación Público Privada (PPP) en el sector eléctrico, pero por falta de financiamiento se postergó hasta el 31 de marzo de 2020 la fecha de cierre para realizar consultas. De esta manera, en los hechos se terminó de caer otras de las promesas del gobierno de Macri para el sector energético y, al igual que lo ocurrido con el gasoducto de Vaca Muerta, será el próximo gobierno el encargado de definir la situación.

Qué son los contratos PPP

Los contratos PPP son aquellos firmados por organismos que integran el sector público nacional y sujetos privados con el objeto de desarrollar proyectos de infraestructura y vivienda, entre otros destinos. La contratación contempla la constitución de un fideicomiso financiero que tiene a su cargo la suscripción y ejecución del contrato hasta su terminación. Los fondos que administra provienen de un cargo específico que para el caso del sector eléctrico lo deberían abonar los usuarios que componen la demanda del sistema.

El tramo Río Diamante-Charlone iba a ser el primero de una serie de ampliaciones a la red de transmisión eléctrica. Se trata de la línea de transmisión de extra alta tensión de 500km de 500kV y 400 km de 132kV, con una inversión estimada de 650 millones de dólares.

En abril del año pasado el gobierno dejó en claro su intención de avanzar con el financiamiento de seis obras de transporte de electricidad a través del régimen de PPP. El objetivo era que la línea Río Diamante – Charlone fuera la primera de esa serie y se fijó como objetivo subir el pliego en julio al portal de la entonces secretaría de Participación Público Privada y abrir un período de consultas por 60 días, pero la crisis financiera alteró los planes y recién en octubre el pliego estuvo disponible para avanzar con esta primera obra.

El 18 de diciembre, cuando la licitación estaba pronta a salir, el gobierno sorprendió al anunciar la suspensión de todos los proyectos de infraestructura vial, energética, educativa y ferroviaria que pretendía financiar a través del régimen de PPP. La explicación oficial fue que la suba del riesgo país, que ese día había alcanzado un récord de 787 puntos, encarecía el financiamiento y hacía inviable la puesta en marcha de este sistema.

Finalmente, en marzo se llamó a licitación pública nacional e internacional para contratar la construcción, y posterior operación y mantenimiento, pero justo en ese momento el riesgo país había vuelto a dispararse llegando a cotizar a 768 puntos

La resolución 81/19 había establecido que el pliego de bases y condiciones y sus anexos, y el modelo de contrato de PPP podrían consultarse en la web de la Secretaría de Energía, siendo el límite para la presentación de ofertas el 27 de mayo. Luego esa fecha se fue corriendo y ahora se la fijó el 31 de marzo de 2020, aunque en los hechos la licitación está caída.