El gobierno nacional resolvió ampliar la emisión de Letras del Tesoro en pesos por 7000 mil millones de pesos. Estos títulos se colocarán en organismos públicos. El Tesoro debe "raspar la olla" entre los organismos estatales porque no logra recuperar la confianza del sector privado. La resolución del Ministerio de Hacienda indica que “hasta el 30 de abril de 2020 las entidades públicas sólo podrán invertir sus excedentes transitorios de liquidez mediante la suscripción de Letras precancelables emitidas a un plazo que no exceda los ciento ochenta días por el Tesoro nacional”. En septiembre ya se había lanzado una reglamentación para obligar a las entidades públicas a comprar deuda con sus excedentes presupuestarios.

El justificativo del Palacio de Hacienda es que “resulta apropiado maximizar la posibilidad de recurrir al financiamiento a corto plazo, a través de los excedentes transitorios de liquidez de todas las Jurisdicciones y Entidades del Estado Nacional, incluidos los fondos fiduciarios y patrimonios de afectación específica administrados por entidades del sector público”. Esta colocación de deuda se da en un contexto de “inestabilidad financiera y cambiaria que atraviesa la economía argentina y por eso desde el Gobierno se toman una serie de medidas para restablecer el equilibrio de las variables económicas”, reconoce en la resolución el ministerio de Hacienda.